Moscú, 20 ago (PL) El Ministerio de Defensa de Rusia confirmó hoy que más de 200 unidades de sistemas antimisiles S-300 y S-400 intervienen en una maniobra de tiro real para neutralizar una hipotética invasión aérea.
Los simulacros tácticos transcurren en el polígono de Aushluk, en la sureña provincia de Astracán, y prevén el lanzamiento de dos tipos de blancos balísticos diseñados en imitación de medios aeroespaciales enemigos y su desplazamiento sobre territorio ruso para finalmente interceptarlos, dijo el portavoz a Itar-Tass.
Baterías y regimientos responsabilizados con la defensa antiaérea de Moscú y la región central industrial de Rusia, al igual que las unidades del sur del país intervienen en este ejercicio, indicó la fuente.
Subrayó el oficial que unos 800 integrantes de las tropas de defensa aeroespacial manejan y mantienen operativo todo el armamento movilizado para la maniobra.
Tres regimientos armados con sistemas S-300 Favorito y S-400 Triunfo entrenan para disparar sobre la marcha, explicó el militar.
En relación con los hipotéticos objetivos móviles, aclaró que son utilizados los blancos balísticos Kabán (jabalí) y balísticos Pischal (cañón de mano), contra los que se hace impacto a distintas alturas.
La maniobra pone a prueba, igualmente, vehículos artillados con sistemas de cañón-misil antiaéreo Pantsir-S-1 (SA-22 Greyhound en la denominación de la OTAN) y radares capaces de detectar objetivos aéreos a distancias de hasta 600 kilómetros y alturas superiores a los 100 kilómetros.
Según el portavoz, el traslado hacia Astracán de toda la técnica implicada en la maniobra y la tropa movilizada requirió siete convoyes ferroviarios y tres aviones pesados de transporte IL-76.
La realización de las actuales maniobras coincide con un incremento sin precedentes de las amenazas del Pentágono y la OTAN contra Moscú, en respaldo al poder establecido en Ucrania mediante la ruptura del orden constitucional el 22 de febrero último.
En los últimos tiempos se incrementó la presencia de naves de guerra fuertemente artilladas de Washington en el mar Negro, y se multiplicó el número de efectivos, cazas y bombarderos de la alianza noratlántica en territorios cercanos a Rusia como las repúblicas exsoviéticas del Báltico, Polonia, y Rumanía.
La OTAN evalúa, asimismo, una reciente propuesta de Estonia, territorio fronterizo con Rusia, para crear un centro de ciberguerra contra este país.
En este contexto, Moscú informó ayer que cuatro nuevas lanzaderas fijas de misiles balísticos intercontinentales Yars de 11 mil kilómetros de alcance estarán listas antes de que concluya 2014.
Con una ojiva de guiado individual, este portador nuclear propulsado por combustible sólido consta de tres etapas y fue diseñado por el Instituto de Tecnología Térmica de Moscú en respuesta al escudo antimisiles de Estados Unidos
Rusia activa sistemas coheteriles contra supuesta invasión aérea
