La Cruzada Nacional contra el Hambre ha permitido elaborar por primera vez un padrón para brindar ayuda de manera estratégica, integral y concreta a población con problemas de alimentación u otras carencias sociales, afirmó Juan Manuel Mendiola García.
El director general adjunto de la Comisión Intersecretarial de la Cruzada Contra el Hambre, recalcó que más que atender a los 60 millones de pobres del país “estamos buscando abatir el hambre en los sectores más necesitados”.
Al participar en el Seminario Internacional “Prioridades Socioeconómicas y Redes de Colaboración”, aseveró que el objetivo es garantizar la seguridad alimentaria y los diferentes factores que la propician.
Por ello, para su ejecución ha sido vital la participación intersecretarial de 16 secretarías y tres organismos públicos, coordinando al menos 90 programas federales, dijo en el encuentro al que acudió en representación de la secretaria de Desarrollo Social, Rosario Robles Berlanga.
En su más reciente jornada se han beneficiado a más de 3.1 millones de mexicanos, pues atiende de manera integral la condición de pobreza extrema, mediante programas que ayudan a aumentar los ingresos, así como una provisión directa y mejor producción de alimentos.
Aclaró que se trata de gente en condiciones de pobreza extrema de alimentación, y no necesariamente son todos, ya que de acuerdo con este primer padrón existen 27.4 millones de personas con carencias de alimentación, es decir 23.3 por ciento de la población del país.
Dichas estadísticas revelan que en pobreza extrema existen al menos 11.5 millones de personas, lo cual revela que en México hay sectores que requieren una atención focalizada.
Ante tal situación, la estrategia iniciada a través de “SinHambre” es integral, de inclusión y bienestar social, cuyo objetivo es atender los diferentes factores que afectan a la población en pobreza extrema y que derivan en una carencia de alimentación.
Reiteró que por ello se conjuntan esfuerzos y recursos de la federación, los estados y los municipios, así como los sectores público, social y privado, y organismos e instituciones internacionales.
Ante los asistentes al encuentro, organizado por la Universidad Autónoma Metropolitana (UAM), recalcó que esta cruzada no se limita sólo a distribuir alimentos.
A través de esta estrategia se implementan acciones para atender nueve indicadores estratégicos con base en las carencias sociales que aplica el Consejo Nacional de Evaluación de la Política de Desarrollo Social (Coneval) para medir la pobreza.
Estos son: Rezago educativo, padecido por 2.8 millones de mexicanos; Carencia de servicios de salud, por 2.4 millones; Población con ingreso menor a la línea de bienestar mínima, con siete millones; y Carencia por acceso a la alimentación, siete millones.
Asimismo, Carencia de seguridad social, 6.7 millones; Carencia de servicios básicos, 4.6 millones; Carencia de calidad de la vivienda, 3.4 millones, así como Índice transversal de género, y Participación social.