(ng) Enrique Barrera, catedrático de la Universidad de Rice en Houston, vinculará al Tecnológico de Monterrey en Puebla con proyectos de investigación en el área de ciencia de los materiales que se generan en universidades de China y centros de investigación de la NASA, con el objetivo de detonar el desarrollo de la industria aeroespacial y nanotecnología en el Estado e impactar de igual forma a la industria automotriz
Said Robles Casolco, miembro de la Escuela Nacional de Ingeniería del Tecnológico de Monterrey, comentó que por primera vez universitarios poblanos tendrán la oportunidad der realizar la experimentación de sus investigaciones en laboratorios de la Agencia Estadounidense del Espacio y la Aeronáutica, ubicada en Houston, Texas.
Y es que en palabras del también miembro del Sistema Nacional de Investigadores (SNI) Nivel 1, esta nueva línea de investigación surge como respuesta a la escasa vinculación academia-empresa, los esfuerzos aislados y dispersos que existen en el país., tal y como lo menciona el estudio Diagnóstico y Prospectiva de la Nanotecnología en México.
En este estudio se menciona la existencia de 56 instituciones que desarrollan actividades de investigación y/o docencia relacionadas con la nanotecnología, las cuales albergan a 449 investigadores, de los cuales 29 por ciento pertenecen a Centros CONACYT, 18 por ciento a la Universidad Autónoma de México, 15 por ciento al Instituto Mexicano del Petróleo, 8 por ciento al Instituto Politécnico Nacional, y el 30 por ciento restante a otras 20 instituciones ubicadas en distintos estados del país.
Por esta razón, la vinculación entre la Universidad de Rice y el Tecnológico de Monterrey, en palabras de Barrera, también tiene el propósito de transferir el conocimiento que esta institución ha generado en el área de materiales, además de aprovechar la relación que posee con empresas internacionales como Technip, líder mundial en construcción, administración de proyectos e ingeniería para el sector energético.
Así, para el experto en materiales la forma en que Puebla puede potenciarse como un Estado generador de tecnología de punta, inicia con la formación de los universitarios y la conformación de estancias de investigación en diferentes países por parte de los académicos.
“En México se observa un crecimiento económico que debe aprovecharse a favor del desarrollo tecnológico. Y un estado como Puebla tiene la oportunidad para invertir en un área como la nanotecnología. Si existe la oportunidad sería excelente hablar con el gobernador para impactar aún más a la comunidad universitaria”, mencionó Barrera.
Así mismo, el catedrático de la Universidad de Rice especificó la necesidad de comercializar los resultados de las investigaciones. Un ejemplo de esto es el desarrollo de un líquido integrado por nanotubos que brinda mayor resistencia a la composición del vidrio, y que se aplica en aviones, automóviles y naves espaciales.
Este desarrollo, financiado por la Oficina de Investigación Naval de Estados Unidos, busca ser comercializado como un limpiador de vidrios que se encuentra en cualquier supermercado.