Moscú, 6 jun (ULAN-PL) El ministro de Asuntos Exteriores de Rusia, Serguei Lavrov, advirtió hoy sobre los pretextos contra de Siria para justificar una intervención militar extranjera, como el tema en torno a las armas químicas, propalado por canales mediáticos occidentales.
En rueda de prensa al término del Consejo de países del Báltico, en la septentrional ciudad de Kaliningrado, Lavrov denuncio que el presunto uso por las autoridades sirias de ese letal armamento se está convirtiendo en un elemento de especulación y podría ser un pretexto para una invasión en ese país árabe.
Dijo no descartar que algunas fuerzas declaren la necesidad de una intervención extranjera, bajo el argumento de que se sobrepasó la denominada línea roja.
Al mismo tiempo, el canciller ruso consideró un error que la ONU no haya respondido de manera oportuna a una solicitud de las autoridades de Damasco para investigar el hecho concreto, ocurrido en marzo en las cercanías de Alepo, donde hubo indicios de que los opositores armados emplearon armas químicas contra la población civil.
Llamó a aclarar con brevedad todos los casos relacionados con el uso de armas químicas en Siria, de acuerdo con el canal televisivo internacional Russia Today.
Al respecto recordó que Moscú sigue a la espera de información oficial de Turquía en relación con el arresto de unos 12 hombres armados, a quienes le ocuparon en ese territorio el letal gas sarín.
El jefe de la diplomacia rusa consideró medular una posición clara y sin ambigüedades de la comunidad internacional frente al conflicto sirio.
Deben decidir si están del lado de quienes insisten en un cambio de régimen por medio de la violencia o de quienes quieren una solución a través del diálogo, advirtió Lavrov.
La Cancillería de Rusia manifestó este jueves preocupación por las versiones de que organizaciones terroristas, cuya actividad comprende Turquía, Irak y Siria, cuentan entre sus arsenales de combate con agentes químicos, equipos y tecnologías para su producción.
El portavoz oficial del Ministerio de Asuntos Exteriores, Alexander Lukashevich, declaró hoy que el gobierno sirio ha advertido más de una vez sobre el potencial peligro del uso de ese tipo de armamento, prohibido por las convenciones internacionales, en el conflicto interno de ese país árabe.
Como constata el curso de los acontecimientos en torno a Siria las preocupaciones de Rusia cobran fundamento porque se recurra a la injerencia extranjera, bajo ese pretexto, alertó el diplomático.
Respaldó los llamados de Moscú a que la ONU investigue sin dilaciones la petición oficial siria de esclarecer los hechos del 19 de marzo, en las proximidades de Alepo, y evitar así los aspectos de provocación que pudieran estar detrás de esa campaña antisiria.
La diplomacia rusa despliega ingentes esfuerzos para lograr un consenso en torno a la convocatoria de una conferencia internacional (Ginebra II), torpedeada por algunos gobiernos europeos y regionales, interesados en el derrocamiento del presidente Bashar al Assad, y la desintegración de ese país, como ocurrió en Libia, en 2011.