“Resulta imperativo que en aras de la riqueza y diversidad cultural de esta ciudad, las autoridades fomentemos la creación de espacios para que la juventud y la población en general encuentren alternativas de calidad para acceder a la cultura y todas sus manifestaciones” aseveró la diputada de origen priísta Karla Valeria Gómez Blancas.
La sucursal en el Distrito Federal del establecimiento conocido como Hard Rock Café, fungía como restaurante, foro de conciertos y museo de diversos objetos relacionados con la música rock, principalmente de Inglaterra, Estados Unidos y algunos de México.
Debido a que el pasado 19 de mayo de 2013 cerró definitivamente sus puertas al público, generando un vacío en cuanto a espacios de expresión de dicho género musical, la presidenta de la Comisión de Asuntos Indígenas de la Asamblea Legislativa del DF, Karla Valeria Gómez Blancas solicitó mediante punto de acuerdo que el Jefe de Gobierno decrete la expropiación del inmueble que albergaba el establecimiento conocido como Hard Rock Café ubicado en Campos Elíseos número 290, colonia Polanco; y que implemente un proyecto que involucre la participación de instituciones públicas y privadas a efecto de habilitar dicho espacio para el desarrollo de actividades culturales y artísticas relacionadas con el rock y sus diversas manifestaciones, en beneficio de los habitantes de la Ciudad de México.
La legisladora, recordó que en 2006, la tribu seminole de Florida, Estados Unidos compró la marca. “Su cierre obedece, según pudimos saber en diversos medios, a diferencias comerciales entre la operadora en México y los nuevos propietarios, cuya intención podría ser reabrir el inmueble para establecer un casino, su principal actividad”.
Según el artículo 1, fracción III de la Ley de Expropiación considera como causa de utilidad pública la construcción de cualquier obra destinada a prestar servicios de beneficio colectivo; en cuanto al ámbito local, el artículo 20 Bis de dicho ordenamiento faculta al Jefe de Gobierno del Distrito Federal a declarar la expropiación total que se refiere el punto de acuerdo.
Gómez Blancas reconoció que durante muchos años las autoridades de la capital impidieron y reprimieron en cuanto les fue posible las diversas manifestaciones de este género musical o cualquier símbolo asociado a él toda vez que existía la creencia generalizada de que este tipo de música no hacía nada por el desarrollo cultural del individuo.
“Por fortuna, el tiempo ha desmentido estos argumentos. El rock ha encontrado en nuestra ciudad identidad propia, con compositores y ejecutantes que abordan cuestiones y problemáticas cotidianas, con audiencias ávidas y receptivas. Nuestra juventud gusta de este género y ha demostrado en múltiples ocasiones que la música puede ser un vehículo para combatir violencia, adicciones y otros problemas sociales, como el desempleo o la falta de educación” apuntó.
Finalmente considero que la coyuntura ofrece una oportunidad inmejorable para que el gobierno de esta ciudad demuestre su compromiso con los principios de equidad e inclusión social para el desarrollo humano, al habilitar el inmueble como espacio de desarrollo de actividades culturales y artísticas.