Quito, 15 jun (PL) Las reformas a la ley de Minería son positivas para el país, defensoras de la soberanía, simplifican trámites y protegen la naturaleza, aseguró el presidente de Ecuador, Rafael Correa.
El mandatario resaltó que grupos opositores rechazaron las propuestas y la critican con argumentos absurdos, al tiempo interrogó sobre los derechos colectivos que supuestamente se afectan, al prohibir el uso de mercurio, lo cual protege el medio ambiente y desarrollar la mediana empresa.
Fustigó declaraciones de organizaciones que afirman que dicha ley es impuesta por las grandes trasnacionales, cuando la regulación favorece a las empresas públicas.
El jueves se aprobó aquí, con 105 votos, un paquete de reformas solicitadas por El ejecutivo en condición de urgentes para la economía del país.
Dichas reformas posibilitan que este sector se convierta en fuente generadora de prosperidad para Ecuador, aseguró el viceministro de Minas Richard Vera.
Añadió que representan mejoras absolutas, pues de acuerdo con lo previsto el 60 por ciento de las regalías se quedarán en la comunidades donde estén enclavados los yacimientos.
Nuestros recursos están casi intactos y con las reformas planteadas se permiten la participación del Estado, la conservación ambiental y seguridad para los trabajadores, apuntó.
La ley es urgente para combatir la pobreza, será fuente importante de empleo de recurso para cambiar la matriz productiva para acelerar la forma de distribución de la riqueza, precisó.
Con la aprobación por el Parlamento de los cambios a Ley de Minería, ya Ecuador cuenta con un apoyo legal que crea el concepto de mediana minería y norma las regalías para proyectos de inversión social.
La actividad minera ilegal ejercida por personas naturales o jurídicas o grupos de personas, nacionales o extranjeras sin contar con los títulos, autorizaciones, permisos o licencias, será sancionada conforme las prescripciones de la ley.
Los bienes, maquinarias, equipos, insumos y vehículos utilizados en actividades ilegales o no autorizadas de explotación, beneficio o procesamiento, fundición, refinación y comercialización clandestina de sustancias minerales, serán objeto de decomiso o destrucción.
