San Juan, 18 jun (PL) La juventud puertorriqueña transita un camino lleno de escollos que le impide obtener un puesto de trabajo, más allá de la formación académica alcanzada, trascendió hoy en una cumbre de la Cámara de Representantes (Cámara baja).
De acuerdo con la gubernamental Oficina de Asuntos de la Juventud (OAJ), cerca del 50 por ciento de los jóvenes entre los 16 y 21 años no encuentra trabajo y una tercera parte de aquellos cuyas edades oscilan entre 22 y 25 años está desempleada.
La mayoría del segundo grupo posee títulos universitarios, incluso a nivel de maestría, que de nada valen a la hora de encontrar un empleo, según establecieron en la Cumbre de Estrategias de Empleo en Nuestra Juventud de la Cámara baja que pretende evaluar opciones para atender la situación laboral de esta población.
Entre los principales escollos que encuentran los jóvenes destaca la exigencia de que, más allá del título universitario, posean experiencia en el campo laboral, lo que ha obligado a muchos a marcharse a Estados Unidos, esperanzados de un mejor porvenir que no siempre se hace realidad.
A esto se suma el prejuicio hacia ese sector de la población, al que muchos patronos consideran poco comprometidos con la productividad laboral.
Algunos de los planteamientos de la cumbre están dirigidos a que los estudiantes adquieran experiencia laboral durante su proceso formativo en la escuela superior y la universidad, lo que muchas veces no ocurre por la misma dinámica del sistema educativo.
Otro aspecto que salió a flote es que en el proceso de formación profesional, las instituciones académicas puertorriqueñas tienden a imponer criterios de sumisión que impiden a los jóvenes a forjarse como líderes.
La Cámara de Representantes de Puerto Rico evaluará los resultados de la cumbre con el fin de introducir legislación que contribuya al desarrollo laboral de la juventud, según su presidente, Jaime Perelló.
