Damasco, 22 ago (PL) Siria tiene hoy entre sus prioridades la próxima apertura de centros para el tratamiento del cáncer en todas las provincias, a pesar de las afectaciones derivadas del conflicto armado y las severas sanciones internacionales impuestas al país.
El ministro sirio de Salud, Saed al-Nayef, aseguró la víspera que algunos fármacos contra la mortal enfermedad serán manufacturados en territorio nacional, si bien una parte considerable se importarán desde la República Islámica de Irán y países amigos.
Por su parte Fares al-Shaar, presidente del Colegio de Farmacéuticos, denunció las afectaciones derivadas de las sanciones decretadas por Estados Unidos y la Unión Europea contra el sector de la salud, sobre todo para la adquisición en esos países de equipamiento médico de avanzada y fármacos de nueva generación.
Subrayó que pese al elevado costo, el ministerio de Salud mantendrá su política de garantizar de manera gratuita los anticancerígenos a la ciudadanía en los centros para el tratamiento de la dolencia.