Naciones Unidas, 23 ago (PL) Las máximas instancias de Naciones Unidas condenaron hoy los ataques con bombas frente a dos mezquitas en la norteña ciudad libanesa de Trípoli, con saldo de una veintena de muertos y cientos de heridos.
El repudio a esas acciones fue manifestado en sendas declaraciones del secretario general de la ONU, Ban Ki-moon, y del Consejo de Seguridad.
El titular del organismo mundial convocó a los libaneses a defender la unidad nacional y a respaldar a las instituciones del estado, en especial las fuerzas de seguridad para mantener la calma y el orden en el país.
Por su parte, el Consejo de Seguridad deploró los ataques y reafirmó que el terrorismo en todas sus formas y manifestaciones constituye una de las más serias amenazas para la paz y la seguridad internacional.
En la misma línea apuntó que todos los actos de esa naturaleza son criminales e injustificables, sin importar dónde, cuándo ni por quién sean cometidos.
El órgano de 15 miembros también instó a preservar la unidad nacional de Líbano frente a los intentos de subvertir la estabilidad del país y llamó a respetar la política de permanecer apartado (disassociation en inglés) del conflicto en Siria