De la fantasía a lo erótico, de ahí a la violencia en «No tendrás rostro»

Por Irma Gallo

Se ha escrito muchísimo sobre la violencia en nuestro país. Tú escoges un género que cruza lo fantástico con lo erótico para hablar de la violencia con V mayúscula. ¿Cómo se te ocurrió utilizar estos recursos literarios, este género?
-Por un lado es el planteamiento de un escenario posible. Es una novela prospectiva en ese sentido, en un sentido negativo, porque es distópica, pero más que nada es una novela que busca confrontar el tratamiento que le hemos dado a la violencia. Creo que tanto gobierno como medios de comunicación nos han acostumbrado a contabilizar la violencia: muertos, muertos, muertos, y es volver regla algo que es una excepción; cada muerto es una excepción.

No se qué tanto hayas leído tú a Cormac McCarthy, y qué tanto La carretera, de Cormac McCarthy, a lo mejor ya te preguntaron esto.

-No, no me lo habían preguntado, y sí…

-El viaje de Fino…

-He leído mucho a Cormac McCarthy. Es curioso porque en La carretera, el protagonista y su hijo van hacia el mar, y aquí es al revés: van del mar a la ciudad.
McCarthy es de los mejores novelistas sobre la violencia. El meridiano de sangre, qué mejor ejemplo que ése y La carretera, por supuesto, pero La Carretera ocurre todavía en este Apocalipsis, y hay personajes, seres humanos que se comen a otros seres humanos y demás. Aquí ya no hay eso, aquí el Mal fue aparentemente extirpado durante algún tiempo, y es una novela amoral en ese sentido.

-Pues te agradezco muchísimo David Miklos esta entrevista.
-Gracias a ti, Irma.

– No tendrás rostro, de David Miklos, ya en Tusquets editores.

Deja tu comentario