Jesús Zambrano Grijalva convocó a las organizaciones civiles a un “cierre de filas” para defender al sector energético y rescatar al campo ante la amenaza privatizadora del PRI.
El presidente nacional del Partido de la Revolución Democrática (PRD), llamó a evitar que se consume la segunda expropiación petrolera, pero al revés, ya que la iniciativa energética del gobierno priista es quitarle al Estado el control del petróleo para entregarlo a empresas privadas.
Afirmó que “el PRI es un pésimo privatizador” y lo demostró cuando privatizó Ferronales, Fertimex, Teléfonos de México e Imevisión, entre muchas otras empresas que eran del Estado mexicano.
Tras la firma del convenio de colaboración política del PRD y el Consejo Nacional de Organizaciones Campesinas y Pesqueras (CONORP), Zambrano Grijalva alertó que el país vive “horas determinantes”, y por ello convocó a las organizaciones civiles y campesinas a sumarse y respaldar la segunda y última jornada de la Consulta Ciudadana que se llevará a cabo el 1 de septiembre sobre las reformas fiscal y energética.
En relación al acuerdo de colaboración con la CONORP, el líder de izquierda afirmó que es indispensable que desde el Pacto por México se atienda de manera especial las voces del sector social, entre ellos los campesinos organizados sin distingo de banderas.
El PRD sabe de la necesidad de rescatar al campo de la crisis que vive por la falta de una política de Estado que ha favorecido a las empresas agroalimentarias y relegó a los campesinos a los niveles de mayor pobreza, desempleo y marginalidad.
En su calidad de presidente en turno del Consejo Rector del Pacto por México, Zambrano Grijalva refrendó su compromiso de impulsar un Pacto Rural con acciones urgentes que reviertan el rezago que padece el sector campesino.
Estamos en momentos de madurez para que desde el Consejo Rector podamos, con miras a las reformas legislativas y Presupuesto de Egresos de la Federación para el 2014, estar en condiciones de impulsar compromisos que tienen que ver con el campo, añadió.
Son urgentes medidas de Estado porque “es aterrador lo que se vive en el campo”, y todos los actores tenemos que actuar con “urgencia”, concluyó.