Ankara, 2 sep (PL) La policía turca es responsable por el uso excesivo de fuerza contra manifestantes pacíficos durante la protestas antigobierno acontecidas entre mayo y julio últimos, anunció hoy un informe realizado por inspectores del Ministerio del Interior.
El documento indica que las autoridades se excedieron en la represión contra los activistas pacíficos, quienes se pronunciaban contra proyectos del Ejecutivo para demoler el Parque Gezi y la Plaza Taskim, considerados entre las pocas zonas verdes de la occidental ciudad de Estambul.
La investigación emitió sus conclusiones a partir del análisis de las imágenes grabadas por las cámaras de seguridad, y de entrevistas a varios agentes que participaron en las acciones de dispersión de los manifestantes, reportó el diario Milliyet.
En los ataques, la policía utilizó gases lacrimógenos y cañones de gas contra las multitudes, lo que provocó enfrentamientos con un saldo de cinco muertos y miles de heridos.
El exceso de violencia empleada por las autoridades causó, además, una radicalización de las protestas, durante las cuales se pidió la dimisión del primer ministro Recep Tayyip Erdogan, acusado de ejercer el poder de manera autoritaria.
Tras varias semanas de choques, el jefe de Gobierno se reunió con representantes de los activistas y aceptó que respetaría la decisión legal sobre el caso.
En julio, un tribunal de justicia anunció su apoyo a la ciudadanía y retiró el respaldo legal a los planes urbanísticos gubernamentales.