· La vigilancia se extiende a mercados, tianguis, estaciones del metro, escuelas, unidades habitacionales y zonas de comercio ambulante, entre otros.
· Para la misión se destinaron más de mil 800 elementos policiales.
Desde el primer día del presente mes, con motivo de las fiestas patrias, la Secretaría de Seguridad Pública del Distrito Federal aplica la Operación Cometa 2013, para inhibir la venta y compra de material pirotécnico, su transporte y uso en la vía pública.
El operativo, que concluirá el lunes 30 de septiembre, incluye acciones policiales conjuntas con otras autoridades, como la Procuraduría General de Justicia capitalina, las delegaciones políticas y las secretarías de Gobierno, Medio Ambiente y Protección Civil.
Las acciones se desarrollan coordinadamente en los puntos de compra-venta más conflictivos, como los mercados de La Merced –donde la semana anterior se decomisaron casi 300 artefactos explosivos–; Jamaica, Sonora, 25 de julio, San Mateo Xalpa, Tepepan, mercado de dulces Ampudia y tianguis sobre ruedas, entre otros lugares.
Las acciones policiales se basan en búsqueda, detección, ubicación de lugares y personas que ofertan materiales pirotécnicos, sin los requisitos legales correspondientes. Además de difundir a la sociedad sobre los altos riesgos que implica transportar explosivos, almacenarlos y usarlos en los hogares, sobre todos menores y sin supervisión.
Asimismo, los comandantes de cuadrante, establecen patrullajes específicos para la detección de puntos de venta de cohetes en zonas habitacionales y residenciales, entradas y salidas de estaciones del Metro, Metrobús, Tren ligero, así como corredores de comercio ambulante.
Para tal fin, la SSPDF destinó mil 828 elementos de la Policía Metropolitana, Unidad de Seguridad Escolar, de la Dirección General de Inspección Policial y del Escuadrón de Rescate y Urgencias Médicas, apoyados todos por 864 vehículos.
La SSPDF aclara que para el cumplimiento de esta misión, estableció ejes rectores en los que todo el personal de la dependencia deberá participar con su equipo obligatorio, respetar los derechos humanos tanto de las personas que delinquen como de los ciudadanos.