Kabul, 11 sep (PL) Pese a reducir tierras de cultivo, la cosecha de cannabis o marihuana aumentó en Afganistán durante 2012, reza un informe de la ONU difundido hoy en esta capital.
El reporte de la Oficina de Naciones Unidas contra la Droga y el Delito indica que hubo una disminución de 17 por ciento del área cultivada, pero un incremento de ocho puntos porcentuales en cuanto a producción respecto a 2011.
Una investigación del organismo especializado en 16 de las 34 provincias afganas reflejó que el Sur del país concentra 54 por ciento de la cosecha y en menor medida en el Norte y el Este.
Según la pesquisa, en 2012 se obtuvieron 136 kilogramos de cannabis por hectárea, 21 por ciento más que lo conseguido en 2011, aunque por debajo de los 145 de 2010.
El cultivo de lo ilícito constituye el mayor negocio rentable para los agricultores con un ingreso bruto de seis mil 400 dólares por hectárea, superior a los cuatro mil 600 que se ganan en la cosecha de la dormidera (base del opio y la morfina).
De ésta última también hay incrementos notorios, aunque todavía no se han difundido cifras oficiales de lo cultivado el año pasado.
Los aumentos de la producción agrícola ilegal en Afganistán se han registrado en la última década, misma en que se ha desarrollado la invasión y ocupación por una coalición de unos 50 países, bajo el nombre de Fuerza Internacional de Asistencia para la Seguridad liderada por la OTAN y Estados Unidos.