Londres, 25 sep (PL) Un equipo de científicos británicos de la Universidad de Leicester desarrolla un vehículo robot sin ruedas para explorar lugares de difícil acceso en Marte.
Sondas y rovers han sido empleados por décadas para explorar la superficie del Planeta Rojo, sin embargo, su estructura a base de ruedas y brazos robóticos les impide llegar a muchas zonas, y el nuevo aparato después de aterrizar y examinar la superficie que le rodea podrá saltar a otro punto sin ver obstaculizado su avance por laderas empinadas o campos de rocas.
El vehículo tendrá un potente motor con generadores termoeléctricos de radioisótopos. Esa energía alimentará unos dispositivos que extraen dióxido de carbono del aire marciano, que se almacena de forma líquida en su interior.
Entonces, el gas acumulado se bombea a una cámara expuesta al intenso calor de una fuente radiactiva, que lo hace expandirse explosivamente por una boquilla, actuando como propulsor.
Los cálculos sugieren que el impulso conseguido podría permitir que una nave de una tonelada se desplace hasta 900 metros en un solo salto, pudiendo cubrir hasta 40 kilómetros en pocos días.
«La ventaja de este enfoque es la capacidad de atravesar terrenos más agresivos, la movilidad en general y la posibilidad de recorrer distancias mucho mayores de lo que actualmente se logra con los rovers de gran éxito», aseveró Hugo Williams, del Space Research Centre en Leicester.