En el Partido de la Revolución Democrática (PRD) condenamos cualquier acto de violencia venga de donde venga, aseguró el diputado local Alejandro Ojeda, quien demandó a las autoridades correspondientes investigar a fondo los enfrentamientos entre granaderos y embozados que se autodenominan anarquistas.
Subrayó que actos de vandalismo provocados por una minoría podrían ser usados como pretexto para acotar, inhibir o incluso reprimir manifestaciones y marchas.
Por ello, dijo el asambleísta perredista, es necesario deslindar responsabilidades, e investigar si existen grupos de provocadores que por medio de la violencia pretenden crear situaciones de desestabilización y con ello culpar a quienes se movilizan de manera pacífica para protestar o reclamar alguna falta o negligencia por parte de autoridades de los tres niveles de gobierno.
Subrayó que este 2 de octubre fue claro que la manifestación que se realizó para recordar los actos de represión suscitados en 1968, la mayoría, el 98 por ciento de quienes se movilizaron (según la Secretaría de Gobierno del GDF), lo hicieron de manera pacífica.
Pidió que en las investigaciones que se realicen, se esclarezca si existen grupos de provocación y si es el caso, se aclare quienes están detrás de estos grupúsculos de presuntos anarquistas y cuál es el propósito de sus acciones violentas.
Consideró que para enfrentar estas acciones violentas, no se requiere ningún cambio a la Constitución, pues la Carta Magna es muy clara, los mexicanos gozan del derecho de reunirse y manifestarse libremente, siempre que lo hagan de manera pacífica y con cualquier propósito lícito.
Indicó que esa libertad de salir a las calles la tiene el propio PAN que curiosamente a través de su diputado federal Fernando Rodríguez Doval, a nombre de su grupo parlamentario en San Lázaro, llamó a la población a manifestarse en contra de la Reforma Fiscal de Peña Nieto.
“Parece que al PAN sólo le molesta la movilización por las reivindicaciones sociales, porque ahora está presto a movilizarse a favor de los intereses de los grandes empresarios de este país”, indicó
Sin duda, observó, todos pudimos ver los excesos en los que han incurrido un pequeño grupo de activistas que están confundiendo la libertad de expresión y movilización, con acciones totalmente inaceptables, como el vandalismo y la violencia.
Pidió también que en las investigaciones, se sea escrupuloso en procesar realmente a quienes hayan incurrido en excesos, sea del bando que sea, y evitar inculpar a inocentes.
Refrendó que el derecho a la manifestación además de ser un mecanismo de libertad para salir a la calle y hacer un reclamo a autoridades o gobiernos, es instrumento de democracia participativa.
Agregó que los ciudadanos a través de las marchas y libre manifestación pueden expresar su sentir sobre cualquier asunto público, por ello es tan importante como el derecho a votar y ser votado, incluso tan significativo como una consulta pública.