Senadores de México y Estados Unidos se comprometieron a ampliar la cooperación a fin de atender la problemática de los niños y adolescentes no acompañados durante los procesos de repatriación e identificar los mejores cauces tanto materiales como legislativos para evitar cualquier situación traumática para los menores.
Al dar cuenta de los resultados de la LI Reunión Interparlamentaria que se llevó a cabo la semana pasada en Washington, la Comisión de Relaciones Exteriores América del Norte hizo notar que Estados Unidos está consciente de la necesidad de llevar a cabo dichos procesos con apego a los derechos humanos de los migrantes.
La delegación mexicana, encabezada por la senadora Marcela Guerra Castillo, planteó que en fechas recientes se presentaron 17 mil casos de niños y adolescentes repatriados hacia México, sin ninguna protección.
En este sentido, la contraparte estadunidense dijo que revisará los procedimientos de repatriación a efecto de evitar consecuencias traumáticas en los menores de edad.
En el informe de actividades se indica que los senadores mexicanos dejaron ver su preocupación por el tráfico ilegal de armas de Estados Unidos hacia México y señalaron que le harán llegar al senador Tim Kaine, presidente de la delegación norteamericana, un acuerdo aprobado sobre el particular por la Comisión Permanente.
En ese resolutivo se propone que toda arma de fuego, antes de ser puesta en venta, sea objeto de un registro balístico para que al momento de que sea utilizadas se sepa con precisión el nombre de quien la o las haya adquirido originalmente en la armería y se proceda a la búsqueda y localización del dueño.
Esta información sería proporcionada de manera oportuna al gobierno de México, en el marco de aplicabilidad de los principios contenidos en la Ley Federal de Transparencia de Información de México y de la Freedom of Information Act de Estados Unidos, así como de los acuerdos de cooperación entre ambos países en materia de lucha contra el tráfico de drogas.
Entre otros acuerdos, grupos de senadores de los dos países darán seguimiento a la posible ampliación del mandato del Banco de Desarrollo para América del Norte, denominado Nadbank, a fin de que pueda desarrollar y financiar proyectos de infraestructura y de fuentes alternativas de energía.
En materia educativa, convinieron en establecer instancias de coordinación a nivel parlamentario para conseguir que las metas de tener 100 mil estudiantes mexicanos en Estados Unidos y 50 mil estadunidenses en México, se concrete para 2018.
La delegación mexicana mostró su preocupación porque en las negociaciones de la reforma migratoria se ha considerado aumentar significativamente el número de controles fronterizos, situación que podría incrementar la trata de personas y en general otros delitos que favorecerían actividades del crimen organizado.