Washington, 9 oct (PL) La crisis causada por el cierre parcial del Gobierno federal cumplió hoy nueve días desde su inicio y ahora provoca la ira de los defensores de los veteranos y miembros del Congreso.
La decisión del Departamento de Asuntos de Veteranos (VBA, por sus siglas en inglés) de enviar a 10 mil empleados a sus casas debido al cierre del gobierno provoca la ira de los defensores de los veteranos y miembros del Congreso, señala este miércoles un artículo del diario en internet Politico.
Más de siete mil empleados de la Administración de Beneficios de Veteranos y dos mil 754 de la oficina de Tecnologías de la Información pasaron a esta situación con licencia a partir del martes.
La medida eliminará el acceso del público a las oficinas regionales de VBA, lo que significa que la agencia no puede realizar entrevistas personales, el proceso de beneficios, la oferta de trabajo y el asesoramiento educativo.
Asimismo el procesamiento y pago de reclamos continuarán hasta que se agote la financiación, que se espera ocurra hacia el final del mes, apuntó una fuente citada por el diario digital.
Hemos llegado al punto que la agencia federal ni siquiera puede procesar solicitudes de subsidios para personas que han prestado servicio militar, dijo Daniel Dellinger, comandante nacional de la Legión Americana.
El funcionario llamó a los congresistas a ejecutar una revisión de esta situación que obliga al cierre de las agencias del gobierno.
Mientras tanto, en esta capital prosiguen las desavenencias entre la Casa Blanca y los republicanos e intercambios de acusaciones.
La víspera el presidente Barack Obama calificó al dirigente republicano de la Cámara, John Boehner, de obstruccionista, cautivo de los extremistas, mientras este respondió que el mandatario no dice la verdad.
Según la oficina de Boehner: Obama no va a negociar, mientras la Casa Blanca plantea que «esta dispuesto a negociar» sin condiciones.
Pese a estas discrepancias, ayer martes líderes republicanos de la Cámara de Representantes dieron a conocer una propuesta para establecer un comité bipartidista de 20 miembros que haga recomendaciones sobre el incremento del límite de deuda y busque maneras de reducir el déficit del gobierno de Estados Unidos.