La Habana, 18 oct (PL) La jornada final de la Primera Conferencia de Estudios Estratégicos Repensando un mundo en crisis y transformación devendrá hoy propuesta a considerar por los gobiernos para detener el deterioro del planeta.
El argentino Atilio Borón será uno de los ponentes este viernes entre la veintena de los participantes de unos 30 países de todos los continentes, reunidos aquí en los últimos tres días.
Los estudiosos han abordado diversos asuntos relativos a la reconfiguración de los polos de poder como consecuencia de la actual crisis global, así como los conflictos existentes y las posturas de los actores involucrados.
También se refirieron a las experiencias de integración, cooperación y concertación a partir de los nuevos escenarios globales y regionales.
En particular analizaron los procesos en curso en Latinoamérica que enfrentan el actual modelo de dominación hegemónica.
Durante estos debates trascendió que existe una desigualdad en la distribución del agua, con repercusión en los sectores alimentario y de la salud, lo cual ocasiona desestabilizaciones políticas y conflictos sociales en el orbe.
Particularmente, esa situación persiste en África, como una de las zonas más críticas, ya que su población vive mayoritariamente con menos de uno y dos dólares diarios para solventar sus necesidades más apremiantes.
Se conoció que es mayor el pago de agua en los países con más necesidad, pobreza y limitaciones que en los más ricos, mientras crece el número de personas con escasez de este líquido, con una tendencia a su incremento hacia 2050.
Ello se debe, según los expertos, al empleo irracional del recurso, con una explotación intensiva de los mantos acuíferos subterráneos que sirven a dos mil millones de individuos.
Entre otros factores, el cambio climático también agrava de manera sustantiva esta crisis, mientras más del 30 por ciento de las enfermedades están relacionadas al mal uso del agua, precisó el especialista Orlando Rey, de Cuba.
Por su parte, también se informó que en las próximas décadas el precio del petróleo, otro recurso importante para el desarrollo, se mantendrá por encima de 100 dólares el barril.
Los vaticinios señalan que en etapas de crisis y de menor producción el valor del barril podría alcanzar los 250 dólares.
Según pronósticos, el consumo energético debe incrementarse del 50 al 60 por ciento en el futuro próximo, con la India y China a la cabeza.