Canberra, 20 oct (PL) Australia declaró hoy el estado de emergencia en el sur del país a causa de los incendios forestales que azotan esa zona y han provocado la muerte a una persona y destruido 208 casas y 37 mil hectáreas boscosas.
El jefe de Gobierno del Estado de Nueva Gales del Sur, Barry O’Farrell, explicó que la medida da poderes especiales a los servicios de emergencia durante los venideros 30 días para ejecutar órdenes de evacuación y cortes del suministro de gas y electricidad si fuera necesario.
Los meteorólogos auguran malas noticias, nada de lluvia y temperaturas de más de 30 grados, en tanto el aumento del viento podría transportar a kilómetros de distancia la ceniza encendida por las llamas, señaló el portavoz de los bomberos Joel Kursawe.
El comisionado del Servicio de Incendios Rurales, Shane Fitzsimmons, especificó que los bomberos enfrentan condiciones climáticas muy difíciles en la región de Blue Mountains, situación que calificó de extremadamente seria.
Las autoridades ordenaron esta mañana evacuar solamente las localidades de Bell, Mount Tomah y Berambing, porque Mount Irvine y Mount Wilson están bloqueadas ante el colapso de las carreteras.
Cerca de dos mil bomberos trabajan para contener 60 focos activos, 15 de los cuales están fuera de control en un frente de más de 300 kilómetros, amplió un reporte de la cadena ABC.
Las llamas han arrasado 37 mil hectáreas de bosque y destruido al menos 208 casas, además de causar la muerte a un hombre de 63 años, quien falleció al intentar combatir el fuego cerca de su casa en Lake Munmorah, 124 kilómetros al norte de Sídney.
Cifras preliminares del Consejo de Aseguradoras sitúan los daños en 29 millones de dólares, cantidad que podría aumentar en las siguientes jornadas.
La crisis provocada por las quemas se compara a la denominada Navidad Negra de 2001, cuando los fuegos arrasaron tres mil kilómetros cuadrados de terrenos en Nueva Gales del Sur y 121 viviendas.