Bogotá, 20 oct (PL) Indígenas colombianos congregados hace siete días en una gran reunión social y popular, denunciaron las amenazas de grupos paramilitares contra varios de sus líderes para que abandonen la protesta.
En un comunicado difundido en Internet, la Organización Nacional Indígena de Colombia señaló que varias autoridades indígenas como el Consejero Mayor, Luis Arias, Feliciano Valencia y Luis Acosta, fueron declarados objetivos militares por la banda Los rastrojos.
Responsabilizamos al gobierno por la materialización de las amenazas de actores armados legales e ilegales que ocasionen daños en contra de la vida e integridad personal de los representantes indígenas, agrega el texto.
Las comunidades ancestrales señalaron que la movilización busca propiciar una reflexión de la sociedad colombiana en su conjunto y la reivindicación de los derechos de los pueblos indígenas, desconocidos y violentados por el gobierno en razón del sistemático incumplimiento de los acuerdos pactados.
Desde que comenzó la protesta, el lunes último, los representantes de 102 comunidades nativas han denunciado los constantes atropellos y represiones por parte de la fuerza pública en su intento de desalojar a los manifestantes con un saldo hasta el momento de unos 130 heridos y 40 detenidos.
«Rechazamos de manera categórica las estigmatizaciones, persecuciones, amenazas, capturas ilegales, agresiones y vulneraciones de derechos humanos contra la minga por parte del Gobierno», apunta el comunicado.
Nuestras demandas son justas, nuestras acciones son producto del incumplimiento, hemos agotado los escenarios de conversaciones directas con el Estado durante 16 años, agrega.
En Cesar, Cauca, Valle del Cauca, Risaralda, Caldas, Nariño, Huila y La Guajira se mantienen en las carreteras miles de manifestantes pese a las arremetidas del Ejército y Escuadrón Móvil Antidisturbios.
Los enfrentamientos se han sentido con mayor fuerza en el sureño departamento del Cauca y en el central departamento de Risaralda, donde se reportan varios heridos.