París, 22 oct (PL) El ministro de Asuntos Exteriores de Francia, Laurent Fabius, demandó hoy de nuevo explicaciones a Estados Unidos debido a las operaciones de espionaje ejecutadas por organismos de inteligencia norteamericanos en el país galo.
Fabius recibió a su homólogo estadounidense John Kerry, a quien expresó que esas prácticas son inaceptables entre socios y deben cesar, según un comunicado difundido aquí por la cancillería tras el encuentro, donde no hubo declaraciones a la prensa.
El vespertino Le Monde reveló la víspera que sólo en un mes, de diciembre de 2012 a enero de 2013, la Agencia Nacional de Seguridad (NSA, por sus siglas en inglés) interceptó en Francia más de 70 millones de llamadas y mensajes telefónicos.
La información del rotativo está basada en los documentos difundidos en junio pasado por el exagente norteamericano Edward Snowden.
Varios responsables del gobierno, entre ellos el primer ministro, Jean Marc Ayrault, el titular del Interior, Manuel Valls, y el mismo Fabius, manifestaron su rechazo a estos actos.
En una conversación telefónica anoche, el jefe de Estado galo, François Hollande, expresó al presidente Barack Obama su reprobación al espionaje entre países aliados, así como el atentado contra la privacidad de ciudadanos franceses.
Según publica este martes la página oficial del Palacio del Elíseo, Hollande exigió a Obama aportar el conjunto de informaciones que podrían estar en poder de Snowden.
El exoficial de la NSA sacó a luz la existencia del programa Prisma, un mecanismo para controlar comunicaciones telefónicas y de internet en todo el mundo, incluidos organismos internacionales y las entidades de la Unión Europea (UE).
A finales de los años 90 estalló un escándalo similar cuando se conoció la existencia de Echelon, un sistema diseñado por Estados Unidos para registrar llamadas por teléfono y mensajes de fax privados y públicos por medio de satélites de comunicación.
Francia pidió que el tema del espionaje de la NSA se incorpore a la agenda de la cumbre de la UE de esta semana, si bien solo cuenta hasta ahora con el apoyo de Alemania, según el eurodiputado Arnaud Danjean, presidente de la subcomisión de Defensa y Seguridad del Parlamento Europeo.