Madrid, 28 oct (PL) La Agencia Nacional de Seguridad (NSA, por sus siglas inglés) de Estados Unidos interceptó más de 60 millones de llamadas telefónicas en España en el lapso de un mes, afirmó hoy el diario El Mundo.
En su edición de este lunes, el periódico madrileño precisó que la NSA espió 60 millones 506 mil 610 llamadas, cuyo destino, origen y duración fueron registrados entre el 10 de diciembre de 2012 y el 8 de enero de este año.
El matutino de corte conservador fundamenta sus revelaciones en parte de los papeles filtrados por el antiguo analista de la NSA Edward Snowden, refugiado en Rusia.
Concretamente, se refiere a un documento denominado Spain-last 30 days (España-últimos 30 días), que recoge el flujo de llamadas, aunque no incluye su contenido.
Sin embargo, el citado análisis sí registra los teléfonos conectados, el lugar donde se encuentran y la duración de las conversaciones, de acuerdo con la información de El Mundo, que lleva la firma del periodista estadounidense Gleen Greenwald.
Greenwald fue quien destapó el escándalo del ciberespionaje estadounidense y británico en la edición norteamericana de The Guardian.
En junio pasado, el comunicador publicó en The Guardian las revelaciones de Snowden sobre el programa de vigilancia PRISM y otros proyectos de la Agencia Nacional de Seguridad clasificados como de alto secreto.
Siempre según la versión del cotidiano madrileño, la NSA accedió además, a través de las operaciones con metadata, a información personal de los usuarios mediante el navegador de Internet, el correo electrónico y redes sociales como Facebook o Twitter.
Esta información trasciende el mismo día en que el gobierno conservador de Mariano Rajoy tiene prevista una reunión con el embajador estadounidense en Madrid, James Costos.
Rajoy ordenó el pasado viernes convocar al diplomático para recabar información sobre el presunto espionaje de EE.UU. a políticos y miembros del Ejecutivo español.
En base a documentos clasificados revelados por Snowden, el diario británico The Guardian aseguró la semana pasada que Washington interceptó conversaciones telefónicas de 35 líderes mundiales.
En el caso de Madrid, esta labor de vigilancia se efectuó en paralelo a la masiva recogida de datos procedentes del rastreo de comunicaciones electrónicas y telefónicas de los ciudadanos españoles, tal y como ha sucedido en otros países.
A pesar de los trascendidos, Rajoy señaló el pasado viernes que por el momento su administración no tiene certeza de que Estados Unidos interceptara las comunicaciones de ciudadanos o políticos españoles, como reveló ese día el periódico El País.