México, 28 oct (PL) El pleno del Senado mexicano comenzará hoy la discusión de la Ley Federal de Presupuesto y Responsabilidad Hacendaria (LFPRH) propuesta por el Gobierno, cuyo dictamen ya fue aprobado el viernes último por comisiones de esa cámara legislativa.
Los miembros de las comisiones unidas de Hacienda y Crédito Público, y Estudios Legislativos, Segunda, avalaron la semana última el documento turnado por la Cámara de Diputados, como parte de la discusión de la reforma hacendaria y el paquete económico para 2014 del Ejecutivo.
El dictamen de la LFPRH, al que se le realizaron varias reservas, obtuvo la luz verde de esos grupos de la Cámara Alta con nueve votos a favor, ocho en contra y una abstención.
Durante el debate de la medida, Mario Delgado, senador del Partido de la Revolución Democrática, propuso integrar al dictamen un plan de austeridad mediante el cual, durante 2014, el Ejecutivo realice acciones para generar ahorros de cinco por ciento en los sueldos del personal de mandos medios y superiores.
El parlamentario también pidió economizar un cinco por ciento de las operaciones del gasto corriente estructural que no esté relacionado con programas de atención a la población, medidas que deberán de aplicar para los poderes Legislativo y Judicial, así como para los entes autónomos.
Según reseñó el diario El Economista en su versión digital, las reformas a la LFPRH buscan garantizar la responsabilidad fiscal de manera integral, al reglamentar aspectos tanto en materia de ingresos y gastos como de endeudamiento y transparencia.
Establece que el crecimiento del gasto corriente estructural sea de 2,5 por ciento anual en términos reales para 2015 y 2016, mientras que de 2017 en adelante el aumento de dicho indicador no podrá ser mayor al del Producto Interno Bruto potencial.
La víspera, miles de personas se reunieron en el Zócalo capitalino en respuesta a un llamado del líder del Movimiento de Regeneración Nacional, Andrés Manuel López Obrador, para manifestarse contra las reformas energética y fiscal promovidas por el Gobierno.
El también excandidato presidencial pidió posponer la reforma fiscal, pues considera que primero debe aplicarse un plan de austeridad para ahorrar 385 mil millones de pesos -unos 30 mil millones de dólares- del presupuesto público con la eliminación de gastos innecesarios y privilegios de los altos funcionarios.