Moscú, 7 nov (PL) Los cruceros rusos porta misiles insignia Pedro el Grande, de la Flota rusa del Norte, y Variag, de la del Pacífico, comenzaron maniobras de interacción interflotas en la zona central del mar Mediterráneo, confirmó hoy una fuente militar.
El portavoz del destacamento de la Armada cuyo campo de operaciones es el mar del Norte, capitán de navío Vadim Serga, aseguró que los marineros de las dos tripulaciones también simularán repeler con helicópteros ataques de submarinos y de unidades de superficie.
Serga explicó que los ejercicios de interacción figuran entre las principales misiones de las unidades rusas de la Flota del Norte que realizan expediciones a regiones remotas.
La presencia en el Mediterráneo de los buques insignias de dos flotas rusas ratifica la voluntad expresada por el jefe de la Armada, almirante Víctor Chirkov, de evitar la más mínima amenaza contra las fronteras estatales de la Federación.
Chirkov ha reiterado que Moscú fortalecerá su flotilla en esa zona hasta el límite de su autosuficiencia para satisfacer la tarea asignada.
La misión está totalmente clara, impedir la más mínima amenaza para las fronteras y la seguridad estatal, reiteró ante la prensa durante una visita a San Petersburgo.
En este contexto, la interacción en el Mediterráneo del porta misiles Variag con el crucero de propulsión nuclear más poderoso de Rusia, el Pedro el Grande, reiteran el propósito del Kremlin de reforzar su presencia naval en la conflictiva zona.