Bruselas, 15 nov (PL) La inflación en la Eurozona registró en octubre un retroceso, hasta colocarse en su mínimo nivel en los últimos cuatro años, informó hoy la oficina de estadísticas de la Unión Europea, Eurostat.
De acuerdo con los reportes, la baja estuvo motivada por una reducción en las cotizaciones de los combustibles y las telecomunicaciones, por lo que la inflación de precios al consumidor en ese bloque se sitúo en 0,7 por ciento.
Dicha cifra, según los analistas, es inferior al límite del dos por ciento trazado por el Banco Central Europeo (BCE), y no constituye aun una preocupación para las autoridades europeas.
Sobre una base anual, la caída de los costos del combustible para calefacción y transporte, así como también los de algunas firmas de telecomunicaciones, tuvieron el mayor impacto sobre la tasa de inflación, compensando alzas en electricidad y alquiler.
La tasa de inflación bajó a menos de uno por ciento por primera vez desde febrero del 2010, excluyendo los volátiles costos de la energía y los alimentos.
El alza de precios había sido de 1,1 por ciento interanual en septiembre, y de 2,5 por ciento hace un año.
Ante la fuerte caída de la inflación, el BCE decidió hace una semana reducir a 0,25 por ciento su tasa de interés, la más baja en la historia de la institución.
Con esa medida y en un escenario de bajo crecimiento en los 17 países del euro, el ente emisor pretende estimular el crédito y alejar el riesgo de la deflación, un fenómeno de baja continuada de los precios que desalienta las inversiones y el consumo.