Alza turística anima pintoresco poblado cubano

Pinar del Río, Cuba, 2 dic (PL) Entre las sierras cubanas, la localidad de Viñales luce hoy más animada que de costumbre por la llegada de cientos de viajeros extranjeros en el inicio de la temporada alta del turismo.
Asidos a ese lugar de la occidental provincia de Pinar del Río, europeos, estadounidenses y latinoamericanos arriban al pintoresco paraje declarado en 1999 Paisaje Cultural de la Humanidad, por el concierto hombre-naturaleza y la conservación de ancestrales prácticas agrarias y artísticas.
En grupos o de forma individual, los visitantes recorren el famoso valle de Viñales, cubierto de mogotes y rocas del período jurásico.
Un gran mirador permite apreciar las vistas más hermosas de ese sitio, distinguido por su tierra rojiza y las parcelas aradas, donde experimentados labriegos cultivan tabaco desde hace varias centurias.    Y como si no bastara con una breve mirada de paseo por la zona, muchos prefieren hacer fotografías desde distintos ángulos, para guardar entre sus recuerdos las vistas del escenario.
Vienen familias completas, jóvenes, jubilados, pero todos se detienen a contemplar las peculiares montañas cubiertas de palmeras y de una fina niebla durante las primeras horas de la mañana, comentó a Prensa Latina Isol Pérez, vecina de esa demarcación.
Luego de admirar la naturaza circundante desde el gran balcón, algunos turistas visitan la estatua erigida en honor a Domingo Ramos, pintor cubano quien dio a conocer al mundo ese escenario a través de sus lienzos.
Obsesionado por el sitio campestre, el artista pasaba horas frente a las montañas de cimas redondeadas junto a su caballete, lienzos y óleos, para intentar captar cada detalle.
Conocido como el pintor del valle de Viñales, Ramos creó numerosas estampas sobre el lugar, expuestas en galerías cubanas y foráneas.
Cerca de allí, el Mural de la Prehistoria no falta en el periplo por la región. Sobre la ladera de una loma, la obra pictórica evoca el pasado de Viñales y a las criaturas que poblaron esos predios en eras remotas, entre ellos, un oso gigante, los amonites (molusco fósil) y algunos tipos de saurios.
La Cueva del Indio resulta igualmente atractiva desde una embarcación que atraviesa parte de sus cavidades acuosas, así como el Palenque de los Cimarrones, inspirado en un campamento de negros rebeldes que evadían los rigores de la esclavitud.
Muy concurrido por estos días, el pueblo sobresale por sus edificaciones de estilo colonial, pequeños restaurantes, abundantes viviendas dedicadas al alquiler de habitaciones y su restaurada iglesia.
Comidas típicas y vinos caseros acompañan los agasajos a los visitantes, además de los sonidos del tres (guitarra de cuerdas dobles) y las controversias de poetas repentistas.
Con tres hoteles y a 160 kilómetros de La Habana, Viñales es el principal destino turístico de Pinar del Río, provincia bautizada como la Catedral del Paisaje en Cuba.

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