México, 4 dic (PL) Tras un debate de 10 horas el pleno del Senado mexicano aprobó hoy en lo general y en lo particular la minuta de reforma política, paso que antecede a la discusión de la iniciativa energética.
El análisis había comenzando en la tarde de ayer con un llamado de los senadores de izquierda a posponer el tema hasta el próximo periodo legislativo.
Yo les pido que reflexionen para no votar reformas en contra de las leyes y derechos nacionales, declaró en tribuna Manuel Bartlett, del Partido del Trabajo, quien fue apoyado por senadores del Partido de la Revolución Democrática (PRD) y del Movimiento Ciudadano.
Pero el gobernante Partido Revolucionario Institucional (PRI) y el conservador Partido Acción Nacional (PAN) siguieron adelante con el debate de la reforma, que establece la reelección de legisladores y alcaldes, la creación del Instituto Nacional Electoral y la posibilidad de gobiernos de coalición.
La iniciativa gubernamental, puesta como condición por el PAN como paso previo para discutir después la reforma energética, determina que los diputados federales podrán reelegirse en tres ocasiones y los senadores en una, de manera que puedan estar en sus cargos hasta 12 años.
También contempla la creación del Instituto Nacional Electoral en sustitución del Instituto Federal Electoral, cuyos recursos materiales, humanos y financieros pasarán al nuevo organismo.
La nueva dependencia contará en su estructura con órganos de dirección, ejecutivos, técnicos y de vigilancia, así como un Consejo General conformado por un presidente y 10 consejeros electorales.
El dictamen dispone, asimismo, que la Procuraduría General de la República se transformará en Fiscalía General de la República, institución que será autónoma, pero cuyo titular podrá ser removido por el Ejecutivo en caso de causas graves.
Se estipula además que a partir de 2024 el Presidente de la República asumirá el poder desde el 1 de octubre, dos meses antes de lo establecido en la actualidad.
A nombre de la comisión de Puntos Constitucionales, su presidente, Enrique Burgos, subrayó que la reforma constitucional en materia político electoral es de gran calado, toda vez que marca una nueva etapa en la historia del país.
Pero los términos de la medida, así como la iniciativa de reforma energética, motivaron la salida del PRD del Pacto por México, firmado hace un año por el presidente Enrique Peña Nieto y los líderes de los principales partidos políticos opositores para impulsar importantes cambios estructurales.
Como se trata de una reforma constitucional, también deberá ser aprobada ahora por la Cámara de Diputados y por los 32 congresos locales.