La Habana, 8 dic (PL) El realizador chileno Orlando Lubbert afirmó hoy que busca en sus obras calidad, una historia que comunique, trascienda en el tiempo y conecte a las personas.
En conferencia de prensa Lubbert dijo que esa fue su pretensión al realizar el filme Cirqo, estrenado mundialmente aquí en el XXXV Festival Internacional del Nuevo Cine Latinoamericano, que se extiende hasta el próximo día 15.
La esencia de la película es la risa como elemento de resistencia ante los sucesos acontecidos durante la dictadura de Pinochet (1973-1990) en Chile, destacó.
Cirqo cuenta la historia de un profesor y su estudiante que escapan de un inminente fusilamiento.
Perseguidos por un agente de la policía y luego salvados por un circo pobre, deben optar entre vivir como clowns en un mundo de risas, o salir al encuentro de sus familias y al rigor de una dictadura.
Con esta cinta no trato de hacer un discurso, dijo Lubbert, sino de ofrecer información a las nuevas generaciones de chilenos interesados en conocer más sobre esa época y los verdaderos hechos.
La escribí en Alemania, durante mi exilio en 1994, y aunque el guión ganó algunos premios no encontraba financiamiento para el rodaje y aún no se ha estrenado en Chile, confesó.
Escogí Cuba para la premier mundial de la película porque considero que el Festival de La Habana es un centro de convergencia del intelecto y el buen cine, donde se muestra lo más actual de la filmografía de la región, comentó.
Pero la experiencia en Cuba trasciende la presentación de Cirqo pues Lubbert fue ganador de un Coral en la primera edición de la cita fílmica y trabajó como profesor en la Escuela Internacional de Cine de San Antonio de los Baños.
A propósito de la realización mañana del seminario ¿Nuevo? ¿Cine? ¿Latinoamericano? se refirió a los guiones como medio para presentar ideas, necesarios para llenar las nuevas plataformas que están aparecen constantemente para hacer y difundir cine.
Un tema, afirmó, para hablar por mucho tiempo…