Turistas europeos y americanos admiran famoso orquideario cubano

Artemisa, Cuba, 9 dic (PL) Hábitat de especies nativas y exóticas, el orquideario de Soroa seduce a turistas americanos y europeos por su antigua y atractiva colección botánica, en medio de las serranías cubanas.

Más de 20 mil visitantes recorren cada año el paraje, mayor vergel dedicado al cultivo de la vistosa planta en Cuba, confirmó a Prensa Latina su director, Jorge Lázaro Bocourt.

Provenientes de Alemania, Francia y Canadá, principalmente, los viajeros pasean por los sinuosos senderos del jardín, fundado en 1943, explicó el estudioso.

Recobrado de los azotes de dos huracanes en 2008 -afirmó-, Soroa luce nuevamente su valioso patrimonio, al aire libre y en umbráculos cubiertos con finas mallas.

Guías especializados acompañan a los recién llegados en su itinerario por el recinto expositivo, situado en la Reserva de la Biosfera Sierra del Rosario, a 76 kilómetros al oeste de La Habana.

Fomentada por el abogado español Tomás Felipe Camacho y el horticultor japonés Kenji Takeuchi, la compilación de orquídeas crece ahora con donativos de centros homólogos y los aportes de coleccionistas privados.

Especialistas del lugar supervisan la adaptación de ejemplares enviados desde Jamaica y de decenas de plántulas obtenidas en la biofábrica de la vecina provincia de Pinar del Río, agregó el investigador e ilustrador científico.

Al referirse a las medidas para conservar en buen estado las colecciones adelantó que a partir del venidero año protegerán con mantas especiales los pabellones donde crecen unas 500 variedades de la llamada Aristócrata de las flores.

El propósito -dijo- es minimizar los efectos de los rayos solares y las lluvias intensas, los cuales pueden dañar las poblaciones vegetales del sitio.

Sede cada dos años de un taller internacional sobre el cultivo de las orquídeas, Soroa lidera expediciones por el país caribeño en busca de nuevas especies.

El estudio de un curioso representante del género Pleurotalis, hallado entre los mogotes de Viñales-, patrimonio mundial-, destaca entre los resultados investigativos del centro, aseguró Bocourt.

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