A nombre de la fracción parlamentaria del PRD, el senador Mario Delgado Carrillo solicitó a la Suprema Corte de Justicia que se pronunciara sobre la constitucionalidad de la consulta popular y también sobre la necesidad de suspender el procedimiento legislativo o dictaminación sobre la reforma energética.
Las decisiones políticas fundamentales deben ser sometidas a la aprobación del Pueblo, quien es el titular de la soberanía, advirtió el senador Mario Delgado, quien afirmó que los ciudadanos mexicanos tienen derecho a la consulta popular en temas de trascendencia nacional.
Al presentar a nombre de la fracción parlamentaria del PRD, una moción suspensiva a la discusión y aprobación de la Reforma Energética, el legislador sostuvo que el poder para reformar la Constitución no puede por sí solo asumir la modificación del texto constitucional, porque en los actuales tiempos no tiene la capacidad ni la facultad de representar a la voluntad general.
Citó al constitucionalista, Ignacio Burgoa, que en su texto Derecho Constitucional Mexicano, establece que las decisiones fundamentales no pueden ser reformadas por el poder revisor de la Constitución, dado que esa facultad sólo corresponder a la Asamblea Constituyente.
Precisa Burgoa: “Son decisiones fundamentales económicas las que se traducen en la propiedad nacional de los recursos naturales específicos, como los hidrocarburos y la gestión estatal en ciertas actividades de interés público, como las confiadas a Pemex, en sus distintas fases de explotación de hidrocarburos, así como la rectoría económica del Estado”.
Por eso, dijo Delgado, ahora uno de los avances es que se abre la vía a la democracia directa, cada ocasión que la situación histórica lo amerite el Pueblo tiene que sancionar las propuestas que afectan directamente a la Nación.
La moción suspensiva, rechazada sin discusión, planteó no aprobar la reforma e n tanto no se pronuncie la Suprema Corte de Justicia de la Nación sobre la constitucionalidad del procedimiento iniciado por un millón seiscientos setenta y dos mil doscientos cuarenta y dos firmas para realizar la consulta popular.
En la tribuna del Senado de la República, el perredista dijo que el debate legislativo se da sobre un tema de la máxima trascendencia nacional, como lo han aceptado el PRI, PAN y PVEM, entonces “¿Por qué si la importancia nacional de la reforma constitucional está fuera de toda duda, se oponen a la realización de la Consulta tal y como lo ordena Constitución?”.
No existe ningún argumento constitucional, político, económico ni social para que no se realice la Consulta; al contrario, se respetaría el derecho de los ciudadanos a participar en la toma de decisiones fundamentales para el país y se dotaría a la reforma del consenso social necesario para hacerla aceptable para el pueblo mexicano, concluyó el senador Delgado Carrillo.