México, 22 dic (PL) La cifra de divorcios en México se cuadruplicó en un periodo de tres décadas, al pasar de cuatro por cada 100 matrimonios en 1980, a 16 por cada 100 en 2011, difundieron hoy medios locales de prensa.
Según cifras del Instituto Nacional de Estadística y Geografía, en 2011 se registraron 91 mil 285 divorcios, pero el número de separaciones es mayor, pues se estima que el doble de parejas en esa condición no concluyen el proceso legal.
En un comunicado de la Universidad Nacional Autónoma de México, el investigador Rolando Díaz, de la Facultad de Psicología, mencionó que los índices son mayores en los estados del norte y en la zona metropolitana de la ciudad de México, refirió el diario El Universal.
De acuerdo con el especialista, el grado de avance económico, social, político y educativo de la mujer es más alto en sitios donde hay mayor cantidad de actos legales que ponen fin al contrato matrimonial.
Por el contrario, las premisas socio-culturales de supremacía del hombre y sacrificio de la mujer son más elevadas en las entidades federativas con niveles inferiores de divorcio.
Al mismo tiempo, en esos estados tradicionales, donde existen menos casos de separaciones, los índices de violencia intrafamiliar resultan más elevados.
Si en 1980 había cuatro divorcios por cada 100 matrimonios, en 1990 y 2000 la cifra era de poco más de siete, mientras que para 2005 aumentó a 12 y ya en 2011 el número llegó a 16.
Díaz apuntó que aunÂque en inÂcreÂmenÂto, esÂtas estadísticas aún no alÂcanÂzan las de naciones que enÂfaÂtiÂzan el deÂsaÂrroÂllo y bieÂnesÂtar inÂdiÂviÂdual soÂbre la arÂmoÂnía soÂcial, donÂde los ínÂdiÂces soÂbreÂpaÂsan el 50 por cienÂto de diÂvorÂcios.
El psicólogo mencionó que en el siglo XX se dio un nuevo ciclo de emancipación y empoderamiento de las mujeres.
Ante ello, señaló, de manera general podemos decir que si no se presentan relaciones equitativas y no se reconoce de manera constructiva el desarrollo de las féminas, deciden no continuar en uniones que impiden su aportación a ellas mismas, a sus familias y a la sociedad.
Si quiÂsiéÂraÂmos amiÂnoÂrar el núÂmeÂro de diÂvorÂcios, agregó el especialista, es neÂceÂsaÂrio traÂbaÂjar a nivel social, en parÂtiÂcuÂlar con niÂños y jóÂveÂnes, a fin de que aprenÂdan a neÂgoÂciar y otorÂgar imÂporÂtanÂcia a sus vaÂloÂres con un amÂplio resÂpeÂto a los de la otra persona, conÂcluÂyó.