Quito, 28 dic (PL) El presidente de Ecuador, Rafael Correa, denunció hoy lo que consideró un gravísimo caso de espionaje protagonizado por un legislador opositor y su asesor, contra el propio mandatario y varios ministros del gobierno.
Ha habido un gravísimo caso de espionaje, y se han encontrado pruebas irrefutables, aseveró Correa este sábado, en un informe de labores transmitido desde un barrio popular de la ciudad portuaria de Guayaquil, 500 kilómetros al suroeste de esta capital.
Agregó que al asambleísta del movimiento opositor Pachakutik Clever Jiménez y a su asesor Fernando Villavicencio, se les ocuparon la víspera correos electrónicos «hackeados» de la cuentas del presidente y de otros ministros.
Tras señalar que no revelaría más detalles del caso, por respeto al debido proceso que sigue la Fiscalía contra los implicados, el mandatario aseveró que los allanamientos de las viviendas de Jiménez y de Villavicencio se hicieron en estricto apego a la ley.
En noviembre pasado, Correa denunció el «hackeo» de su cuenta de correo electrónico, a raíz de que la petrolera estadounidense Chevron, acusada de contaminar la Amazonía ecuatoriana, intentara utilizar uno de sus mensajes en un juicio en Nueva York.
El mandatario dijo entonces que Jiménez estaba detrás del caso de espionaje, y que las autoridades tomarían medidas legales.
Si delito es escuchar al cualquier ciudadano, imagínense ustedes escuchar al Presidente de la República, comentó Correa, quien negó que se trate de una persecución política contra el legislador opositor, como quieren hacer ver algunos medios de prensa locales.
De acuerdo con el mandatario, en un estado de derecho nadie está por encima de la ley, y el gobierno persigue delitos, no personas.