Viena, 31 dic (PL) La Orquesta Filarmónica de Viena dedicará su primera presentación de 2014 a la memoria de los caídos durante la Primera Guerra Mundial (1914-1918) y a la figura del compositor alemán Richard Strauss, nacido hace 150 años.
En declaraciones a la prensa, el director argentino-israelí Daniel Barenboim dijo sentirse muy honrado y conmovido de dirigir por segunda ocasión, antes lo hizo en 2008, a la afamada agrupación, la única del mundo que no cuenta con una batuta propia.
Por su parte, el director ejecutivo de la filarmónica vienesa, Clemens Hellsberg, destacó que el inicio de la primera gran conflagración mundial será conmemorado a través de un vals de Josef Strauss, nunca antes tocado en este tradicional concierto que cada 1 de enero ofrece la orquesta.
La pieza Friedenspalmen (Palmeras de Paz) fue compuesta bajo la impresión de la sangrienta batalla de KöniggrÃñtz, entre Prusia y el Imperio Austríaco en 1866.
El programa de conmemoración de los 100 años de la Primera Guerra Mundial también incluye piezas como Helenen Quadrille, de Eduard Strauss, con la que los músicos quieren rendir homenaje a la esposa de Barenboim, la célebre pianista Elena Bashkirova.
Aparte de los cuatro integrantes de la familia Strauss, la otra gran figura del espectáculo será Richard Strauss (no relacionado con la dinastía musical vienesa de igual apellido), cuyo aniversario cerrado de su nacimiento se celebra en 2014, de ahí que la Filarmónica tocará por primera vez la obra Mondscheinmusik de su autoría.
Entre los 90 países que cada año televisan la presentación destacan España, Portugal, México, Perú y Costa Rica, a los que en esta ocasión se unen Argentina y Palestina.
La selección de Barenboim para dirigir este concierto de paz y buena música no solo responde al hecho de ser uno de los mejores directores de orquesta del mundo, sino también a su activismo social y político.
Barenboim es conocido por sus esfuerzos para fomentar el diálogo entre israelíes y palestinos a través del lenguaje de la música en su Orquesta del Diván de Oriente y Occidente, y en 2009, en su debut en el atril del tradicional recital, brindó para pedir paz en el mundo y justicia en Medio Oriente.
Según los organizadores del evento, a la música se unirá un espectáculo de danza con el toque atrevido de los diseños de vestuario de la británica Vivienne Westwood.
Y para el cierre se reservaron los tradicionales bises del vals Danubio Azul y la célebre Marcha Radetzk.