Roma, 4 ene (PL) El papa Francisco resaltó hoy el valor de la educación en la Iglesia católica para llevar la fe a los más jóvenes, enfrentados a nuevas dinámicas familiares como ser hijos de padres divorciados o de matrimonios entre personas del mismo sexo.
La revista La Civilt Católica publica este sábado ideas del Sumo Pontífice expresadas en noviembre de 2013 durante la clausura de la 82 Asamblea General de la Unión de Superiores Generales de los institutos religiosos masculinos.
Según Francisco, cada día se eleva la cantidad de niños y jóvenes cuyos padres están separados.
«Por tanto, las situaciones que vivimos hoy plantean nuevos desafíos que para nosotros, a veces, son incluso difíciles de comprender. ¿Cómo anunciar a Cristo a estos chicos y chicas? ¿Cómo anunciar a Cristo a una generación que cambia?», indicó.
Se trata de un contexto con nuevos retos para los educadores, agregó, los cuales tienen que estar a la altura de las personas que educan.
«La tarea educativa hoy es una misión clave, clave, clave», reiteró Francisco, quien consideró pilares de la enseñanza «transmitir el conocimiento, transmitir las formas de hacer y transmitir los valores, a través de los que se transmite también la fe».
Las dinámicas que atraviesa la familia moderna son consideradas prioridades por el Sumo Pontífice, y en consecuencia centrarán la Asamblea General Extraordinaria del Sínodo de Obispos, prevista para octubre próximo en el Vaticano.
Con vistas a preparara la cita, la Santa Sede lanzó un sondeo mundial para saber qué piensan los católicos sobre temas polémicos como las uniones de parejas sin contraer matrimonios, las familias monoparentales, el control de la natalidad, el divorcio y el matrimonio entre homosexuales.
El cuestionario de 38 preguntas se realiza con el propósito de conocer los puntos de vista locales sobre estos asuntos de la realidad actual.
Según el documento, «esta crisis espiritual y social, tan evidente en el mundo de hoy, se está convirtiendo en un reto para la misión evangelizadora de la Iglesia referida a la familia».