Washington, 15 ene (PL) La directora gerente del Fondo Monetario Internacional (FMI), Christine Lagarde, reconoció hoy que los países ricos encaran riesgos crecientes de deflación que podrían ser desastrosos para la recuperación de las economías.
Esto significa que los bancos centrales deberían volver a una política monetaria más convencional sólo cuando un crecimiento mundial robusto esté instalado con firmeza, consideró en un discurso pronunciado en Washington la titular del FMI, institución frecuentemente criticada por recomendar impopulares políticas neoliberales.
El crecimiento económico global, que se encuentra estancado aún, se reforzará en 2014, estimó Lagarde, además.
Admitió también que en la Eurozona el elevado desempleo es aún preocupante y dijo que será necesario permanecer vigilante ante los riesgos de volatilidad en el mercado financiero.
De acuerdo con expertos del FMI, la deflación es la baja generalizada y prolongada (como mínimo, dos semestres) del nivel de precios de bienes y servicios.
Ese fenómeno -añaden- suele responder a una caída en la demanda y puede tener consecuencias negativas mayores que la inflación.