Pretoria, 3 feb (PL) Las actas de voluntad y el testamento de Nelson Mandela fueron revelados hoy en Johannesburgo en un acto organizado por la Corte Constitucional de Sudáfrica (CCSA).
El icónico luchador antiapartheid, quien murió hace dos meses, dejó decenas de miles de dólares para la modernización y el mantenimiento de varias instituciones educativas donde cursó estudios.
La escuela secundaria de Qunu, Eastern Cape, el Instituto Clarkberry, el Hilltown Institute, la Universidad de Fort Hare, la Wits University y el Colegio West Orlando fueron algunos de los centros de instrucción beneficiados.
Mandela también donó unos cinco mil dólares a sus dos principales asistentes Thoko Mavuso y Zelda la Grange, además de favorecer a otros funcionarios que lo ayudaron durante su jefatura estatal en Union Buildings.
La voluntad de Madiba fue entregar además unos 150 mil dólares en regalías y obsequios al fondo de confianza de la familia Mandela y otro tanto de dinero para que sea administrado por el Congreso Nacional Africano.
El vicepresidente de la CCSA, Dikgang Moseneke, quien estuvo a cargo de leer el resumen del testamento comentó a reporteros que fue un momento muy emotivo recordar las prioridades sociales y humanas del venerado estadista.
Mandela dejó por otro lado unos 300 mil dólares para cada uno de los hijos de Graça Machel, su viuda, quien -aunque tiene 90 días para impugnar el acta de voluntad- ya renunció a los bienes que le pertenecen.
La Fundación Mandela reveló parte del contenido del documento, no todo el texto fue leído, pero los acápites principales se dieron a conocer.
El combatiente antirracista se convirtió en el primer presidente negro de Sudáfrica en 1994 después de pasar 27 años en cárceles del régimen del apartheid.
En noviembre de 2013 el presidente Jacob Zuma inauguró en Johannesburgo el Centro para la Memoria Pública Nelson Mandela, horas después de visitar al veterano líder antiapartheid convaleciente en aquella fecha.
Además del testamento, el centro atesora cientos de archivos históricos relacionados con la vida de Madiba, fotografías de sus antiguas oficinas, un gran número de publicaciones de su autoría y el Premio Nobel de la Paz que recibió en 1993.