La Coordinadora Nacional de Trabajadores de la Educación (CNTE) de México realizará desde hoy manifestaciones de repudio a la visita del presidente estadounidense, Barack Obama, quien participará el próximo miércoles en una reunión de líderes de Norteamérica.
El gremio magisterial anunció para este lunes el bloqueo de la autopista que une a la capital con Toluca, pues en esa ciudad del Estado de México el mandatario norteamericano se reunirá el 19 de febrero con el primer ministro de Canadá, Stephen Harper, y su homólogo mexicano, Enrique Peña Nieto.
Así lo acordaron los docentes durante Tercer Congreso Nacional Extraordinario de la CNTE, que concluyó la víspera en la ciudad de Oaxaca, y al cual asistieron representantes de las secciones sindicales de 27 estados.
Para el próximo miércoles, cuando tendrá lugar la cumbre de los líderes de las naciones que integran el Tratado de Libre Comercio de América del Norte (TLCAN), los profesores tienen previsto concentrarse en el parque Simón Bolívar de la ciudad de Toluca, para mostrar su rechazo a la realización del encuentro.
A finales de enero último integrantes de la CNTE efectuaron un mitin en las afueras de la embajada de Estados Unidos en esta capital para repudiar la próxima visita de Obama, a quien calificaron como enemigo de la clase trabajadora.
La pasada semana el gremio de docentes realizó una acción similar frente a la legación diplimática de Canadá, donde se opusieron la celebración del encuentro y a las consecuencias que ha traído el TLCAN para México en sus dos décadas de existencia.
Según informó la Secretaría de Relaciones Exteriores mexicana, la VII Cumbre de Líderes de Norteamérica abordará asuntos de la agenda trilateral centrados en la competitividad, pero sin dejar de lado los relacionados con la seguridad.
En conferencia de prensa, el subsecretario para América del Norte de la Cancillería, Sergio Alcocer, manifestó que el encuentro servirá para fortalecer el TLCAN y no para renegociarlo.
No es interés de ninguno de los tres países reabrir el Tratado de Libre Comercio, sino aprovechar las negociaciones que se tienen a través del Acuerdo de Asociación Transpacífico para cubrir aquellos aspectos que hace 20 años no se incluyeron en el pacto, como el comercio electrónico, apuntó.
Mientras grupos empresariales y políticos consideran que el saldo dejado por el TLCAN durante los dos últimos decenios ha sido positivo, organizaciones gremiales y civiles señalan los efectos negativos del mecanismo para amplios sectores de la población mexicana, entre ellos los campesinos y transportistas.