El líder de la diputación ecologista en la Asamblea Legislativa del DF, Jesús Sesma Suárez, denunció que en la iniciativa que reforma la Ley para la Atención Integral de Sustancias Psicoactivas del DF, que presentaron diputados del PRD para despenalizar el consumo de la marihuana y de algunas drogas duras, existen considerables lagunas jurídicas que pueden desatar una guerra entre los narcotraficantes.
Sesma Suárez, explicó que la propuesta habla de legalizar centros de abasto seguros, pero dejaron un vacío legal, pues no se estipula como se abastecerán de yerba estos lugares o los precios en que se comercializará. Esta laguna legal deja abierta la puerta para enfrentamientos entre los diferentes grupos delictivos de la ciudad que trafican con esta droga por surtir los dispensarios, manifestó.
El planteamiento es ambiguo y contradictorio toda vez que el cultivo, comercialización y distribución de la cannabis seguirá siendo un delito, porque su regulación es competencia federal, pero al mismo tiempo se le pedirá a las autoridades no perseguir al narcomenudista ni a los consumidores y considerar este delito como de baja prioridad.
La regulación de la marihuana está destinada al fracaso, nació muerta, advirtió el legislador ecologista al recordar que logró, lo que nadie había conseguido, unir en su contra a diputados de todos los partidos incluyendo a un amplio número de perredistas.