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“Necesito que todo sea muy espiritual en mi ahora. No es una obra solamente llena de color o de texturas o de pigmentos, mi obra es muy fácil de que te puedas conectar, se convierte en un espejo, quizá cuando te pones enfrente de ella quizás refleja tu misma alma. El género sexual no importa, hay mucha sensualidad en muchas de ellas pero las emociones son las que siguen predominando”, comentó el fotógrafo Miguel Milló.
La piel recibe la tierra, la madre tierra envuelve el cuerpo, el cuerpo establece un vínculo primario con la naturaleza más allá de la raza o el género e incluso del tiempo. Son las fotografías de Miguel Millo que Casa Lamm exhibe bajo el titulo Deseos.
A estas imágenes se suma un gran mosaico que es la reinterpretación de una de las fotografías mostrada en Casa Lamm en su exposición anterior titulada orígenes. Los cuerpos intervenidos con pigmentos de la india, plantas y barro hacen de la piel el lienzo de la tierra. En estos convergen la pintura y hasta la escultura.
“Manipuló esa parte de los sentimientos como quiero manipularlos. La música cuando estoy creando la obra juega un papel muy importante para poder generar todas estas emociones. El tacto, el poderte tocar y abrazar, eso es como fundamental para poderte conectar y también el silencio y el no ver. De repente quedarte sin luz por horas hace que te salgas este mundo y que te metas al mundo interno y lo puedas comunicar”.
Para el también publicista sus imágenes son atemporales, como si quisiera dotarlas de una dimensión casi arquetípica.
Mientras tengamos esta tierra de donde realmente surgimos, mientras seamos esta hermandad, va existir esta obra y lo que busco realmente justo es buscar esta hermandad donde el tema de razas, de colores, de rasgos físicos, desaparezca. Finalmente somos iguales en el momento que nos encontremos con la tierra, de esta naturaleza, expresó.
Parte del trabajo de Miguel Milló está siendo expuesto en museos del Instituto Nacional de Bellas Artes en el norte del país y próximamente viajara durante un año iniciando en malasia, para continuar en Tailandia, Singapur y Taiwán. La exposición deseos permanecerá abierta en Casa Lamm hasta el 30 de abril de 2014.