Washington, 20 mar (PL) El presidente de Estados Unidos, Barack Obama, reclamó hoy en Orlando, estado de Florida, que las mujeres reciban el mismo salario que los hombres, como parte de una estrategia demócrata para rescatar la clase media y cortejar el voto femenino.
Informes oficiales señalan que las féminas norteamericanas ganan como promedio apenas 77 centavos por cada dólar que reciben los del sexo masculino al realizar similar trabajo.
La economía recompensa a los trabajadores con un salario digno y es tiempo de que también esto ocurra con las mujeres que trabajan duro, consideró el mandatario durante un foro celebrado en la universidad pública Valencia Collage.
Consideró el Ejecutivo que el país requiere una economía que funcione para todos, «y no solo para unos pocos», mientras respaldó el aporte de las mujeres a la unidad familiar, indicó la televisora ABC News.
El voto femenino, mayoritariamente favorable a Obama, resultó decisivo para que ganara la Casa Blanca en 2008.
Al mismo tiempo, el gobernante defendió la polémica ley de Reforma de Salud, conocida como ObamaCare, e invitó a que más personas acudan a comprar los paquetes que proveen las compañías aseguradoras, antes de que venza el plazo el próximo 31 de marzo.
Con el de Orlando, el Gobierno pretende iniciar una serie de encuentros regionales sobre la mujer, los cuales deben extenderse en las próximas semanas a ciudades como Nueva York, San Francisco, Chicago, Denver y Boston.
Este es el segundo viaje del jefe de Estado al meridional territorio en lo que va de mes, tras el efectuado el 7 de marzo pasado.
Desde hace varias semanas, el mandatario efectúa recorridos por varios estados con el objetivo de impulsar su agenda para este año, denominado Año de acción, en el cual se ha propuesto la creación de nuevos puestos de trabajo en momentos que la tasa de desempleo se ubica en 6,7 por ciento.
Obama viene remarcando desde su discurso sobre el estado de la Unión el 28 de enero, que recurrirá a sus facultades ejecutivas para impulsar su agenda -atacada por la oposición republicana-, siempre que el Capitolio persista en darle la espalda.
Con una popularidad eclipsada y sondeos que muestran la ansiedad y pesimismo de los votantes, el Ejecutivo intenta promocionar su agenda económica enfatizando en el apoyo a la clase media, además de insistir en el aumento del salario mínimo y un plan de ahorro para los jubilados.
El 12 de febrero pasado, Obama firmó una orden ejecutiva que obliga a los empleadores federales en Estados Unidos aumentar el salario mínimo de 7,25 a 10,10 dólares por hora, a partir del 1 de enero de 2015.