Plagian a 5 al día en México

Rubido señaló que una de sus prioridades será el combate a este delito que, durante 2013, llegó a niveles históricos

(ng) En el primer bimestre del año, al menos 330 personas fueron secuestradas, esto es, 5.5 víctimas al día en promedio, según estadísticas oficiales.

Por primera ocasión desde su creación en 1997, el Sistema Nacional de Seguridad Pública (SNSP) divulgó cifras sobre el número de víctimas de secuestro.

Anteriormente, en esa base de datos sólo se difundían las denuncias presentadas por plagio.

Según los registros del SNSP, el número total de denuncias por secuestro fue de 278 en el primer bimestre, es decir, que en algunos casos hubo más de una víctima.

El Reporte Mensual del Número de Víctimas está basado en las carpetas de investigación abiertas en los estados.

REFORMA publicó ayer que las denuncias por este delito se incrementaron 9 por ciento, al pasar de 133 casos en enero a 145 reportados en febrero. Un promedio de 4.8 al día.

De acuerdo con el informe, los estados con mayor número de víctimas son Tamaulipas, con 62; Michoacán, con 45; el Estado de México, con 37; Morelos, con 34; Tabasco, con 27; Veracruz, con 24, y Guerrero, con 19.

Estas entidades concentran 75 por ciento de las víctimas del País y coinciden con los primeros siete lugares por denuncias durante los primeros dos meses.

Sumaron, en conjunto, 248 de las 330 víctimas totales. El Distrito Federal ocupa el octavo lugar nacional, con 13 víctimas; seguido de Nuevo León, con 10, y Baja California, con 8.

Aguascalientes, Baja California Sur, Campeche, Querétaro y Yucatán aparecen con cero víctimas de secuestro.

El mismo reporte indica que cada día al menos 21.7 personas son extorsionadas en el País, lo cual suma mil 305 víctimas de este delito en el primer bimestre del año.

En el mismo periodo se reportaron mil 209 denuncias ante el Ministerio Público del fuero común.

Las cinco entidades con mayor número de víctimas por este delito son el Estado de México, con 262; Jalisco, con 169; el Distrito Federal, con 111; Morelos, con 86, y Michoacán, con 73.

Les siguen Tamaulipas, con 72; Guanajuato, con 63; Baja California, con 51; Nuevo León, con 48; y Quintana Roo, con 46.

Sólo Nayarit reportó cero víctimas en los primeros dos meses del año. En los últimos lugares también están Zacatecas, con una víctima; Tlaxcala y Colima, con 2 cada una; y Sonora, con 3.

En 2013, el SNSP contabilizó 8 mil 42 denuncias por extorsión, la cifra más alta de que se tenga registro. El delito se concentró en Edomex, Distrito Federal y Jalisco.

Héctor Larios, presidente del Observatorio Nacional Ciudadano, advirtió el 18 de marzo que aún existe un grave problema en la clasificación del delito de extorsión.

Dijo que si bien se dan a conocer las cifras mensuales de las procuradurías estatales, no se sabe, por ejemplo, si la extorsión fue telefónica o de otro tipo.

Al comparecer ante senadores el pasado jueves, Monte Alejandro Rubido, propuesto como Comisionado Nacional de Seguridad y cuyo nombramiento podría ser ratificado esta semana, destacó que se trata de un registro nuevo.

«En la reunión del Consejo Nacional de Seguridad Pública del 20 de diciembre se tomó la decisión de publicar no sólo el número de averiguaciones previas, sino que, acompañado del dato de la averiguación previa, se señalaba el número de víctimas», dijo.

Otro de los acuerdos fue la puesta en marcha de una estrategia para contener y disminuir los índices de plagios. La respuesta gubernamental fue crear la Coordinación Nacional Antisecuestro.

Rubido también señaló que una de sus prioridades será el combate a este delito que, durante 2013, llegó a niveles históricos.

«Llegaremos, es mi convicción personal, como lo indicó el Secretario de Gobernación, a llevar el delito de secuestro a su mínima expresión», afirmó el jueves.

El comisionado atribuyó el alza del secuestro y la extorsión a los golpes que el Gobierno está dando a las bandas de la delincuencia organizada.

«En la medida que los golpes (…) están mellando sus capacidades financieras, incluso para su trabajo cotidiano, ellos migran a otro tipo de delitos», dijo.

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