Washington, 27 mar (PL) El Congreso de Estados Unidos aprobó hoy por amplia mayoría sendos proyectos de ley que garantizan un préstamo de mil millones de dólares a Ucrania y dispone sanciones contra Rusia por la anexión de Crimea.
El Senado votó a viva voz la medida, con 98 votos a favor y dos en contra, mientras que minutos después, la Cámara de Representantes avaló una medida muy similar con 399 votos contra 19.
Antes de que concluya la jornada, el órgano legislativo debe conciliar ambos documentos y enviar la propuesta al presidente Barack Obama, de visita en Italia, para que estampe su rúbrica y se convierta en ley, precisó el diario digital The Hill.
La iniciativa fue objeto de debates en las recientes jornadas, debido a los desacuerdos entre ambos hemiciclos sobre una cláusula que ratifica una reforma del Fondo Monetario Internacional (FMI), acápite que a la postre fue retirado.
El texto autoriza al mandatario imponer sanciones como el congelamiento de cuentas o la prohibición de visas a ciudadanos rusos y ucranianos, presuntamente responsables de violaciones de derechos humanos o de corrupción en la nación europea, así como contra quienes actuasen contra la soberanía o la integridad territorial de Kiev.
La medida también prevé una ayuda de 50 millones de dólares en 2015 para Ucrania y otros Estados de Europa Central y Oriental, junto a otros 100 millones de dólares durante tres años destinados a la cooperación en materia de seguridad.
El nuevo paquete de sanciones se suma a los dispuestos la semana pasada por la administración demócrata cuando amplió a casi una treintena la lista de ciudadanos rusos sujetos a penalizaciones, entre quienes se incluyen políticos, funcionarios, empresarios y compañías como Gazprom y el banco Rossia.
Las medidas punitivas están motivadas por la decisión del presidente Vladimir Putin de apoyar los resultados del plebiscito celebrado en Crimea, en el que más del 97 por ciento de los ciudadanos de esa república autónoma decidieron adherirse a Rusia.
El jefe de la Casa Blanca sugirió días atrás que las compañías estadounidenses con intereses en Rusia también pudieran verse afectadas por futuras acciones contra sus homólogas en la nación euroasiática.
Entre las opciones que evalúa Washington para maniobrar en la crisis está el envío de tropas terrestres a la región del Báltico, bajo el pretexto de realizar ejercicios con sus aliados integrados en la Organización del Tratado del Atlántico Norte (OTAN), lo cual incrementaría la escalada y la posibilidad de un conflicto, advierten analistas.
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