Madrid, 8 abr (PL) El Atlético de Madrid recibe mañana al Barcelona en el partido de de vuelta de los cuartos de final de la Liga de Campeones del fútbol europeo, en lo que se espera sea otro duelo memorable.
Un choque de estilos en el Vicente Calderón entre la fortaleza y el contragolpe del Atlético, y la posesión y la calidad del Barcelona, para ver quien pasa a semifinales, tras el 1-1 en el partido de ida en el Camp Nou.
Será un encuentro que pudiera romper el abrazo entre ambos clubes que en esta temporada han empatado en los cuatro enfrentamientos previos, desde el pasado mes de agosto, con su doble enfrentamiento en la Supercopa de España (1-1 y 0-0), con el 0-0 en la decimonovena jornada de la Liga y el empate de a pasada semana en Champions.
Ahora vuelven a cruzarse, tras un resultado que mantiene todo abierto, pero que obliga al Barcelona a marcar algún gol.
Atlético no pasa a semifinales desde hace 40 años, pues en 1974 alcanzó esa fase de la máxima competición continental y fue subcampeón frente al Bayern Munich, mientras que el Barcelona ha alcanzado esa ronda en las últimas seis ediciones.
En el Vicente Calderón el Barcelona no pierde desde febrero de 2010, pero en su estadio el Atlético ha sido prácticamente infalible esta temporada, con 20 victorias, cuatro empates y sólo una derrota -en Copa del Rey ante el Real Madrid (0-2)- en sus 25 partidos en casa.
El Atlético llega en racha, sin derrota en sus nueve duelos más recientes, muy pendiente del hispano-brasileño Diego Costa y con el turco Arda Turan descartado.
Una lesión muscular, sufrida a la media hora del encuentro de ida en el Camp Nou, pone en duda la presencia de Costa, y una pubalgia ha dejado fuera de la lista a Turan, ambos esenciales en el esquema del técnico argentino Diego Simeone.
Costa es la principal garantía goleadora del equipo de la capital española, pues el atacante suma 33 tantos.
Barcelona volverá a vivir otro momento de los que pueden marcarle la temporada, tiene que salir a por el partido, necesitan marcar un gol, pero sobre todo volver a creer en sí mismos.
Además, es el único equipo que no ha faltado a las semifinales de la competición en las últimas seis temporadas.