La Paz, 16 abr (PL) El presidente de Bolivia, Evo Morales, regresa hoy a esta capital luego de entregar a la Corte Internacional de Justicia (CIJ) de La Haya la memoria histórica como parte de la demanda presentada por ese país contra Chile en busca de una salida soberana al mar.
Morales, quien estuvo acompañado por el canciller, David Choquehuanca, y el agente Eduardo Rodríguez, presentó los principales alegatos históricos y jurídicos que fundamentan el reclamo boliviano, interpuesto hace un año ante el referido tribunal.
Poco después, en una conferencia de prensa realizada en La Haya, Morales abogó por la resolución de este diferendo -hijo de un conflicto bélico decimonónico que dejó a Bolivia sin acceso al océano- a través de vías pacífica.
El gobernante dio fe de su confianza en el proceder de la CIJ y dejó sentada su convicción de que los temas pendientes con Chile deben resolverse en tribunales internacionales.
Al mismo tiempo, afirmó que el mar que reclama su país será para el pueblo y no para los pequeños grupos: «Un mar para la patria grande», agregó.
Horas antes, el jefe de Estado recordó que Bolivia sufrió en el pasado una invasión de intereses externos y grupos oligárquicos de la vecina República de Chile y afirmó que ahora se busca una solución de carácter bilateral con la participación de la comunidad internacional.
La Paz acudió a La Haya en abril de 2013, luego de un dilatado e infructuoso diálogo.
Bolivia perdió 120 mil kilómetros cuadrados de territorio y 400 kilómetros de costas durante la Guerra del Pacífico (1879-1883).
En 2006, Morales y la presidenta chilena, Michelle Bachelet -entonces en su primer mandato-, establecieron una inédita agenda de diálogo de 13 puntos, pero las pláticas se diluyeron durante el mandato de Sebastián Piñera, a quien sustituyó Bachelet hace pocas semanas.