Managua, 10 may (PL) A un mes del inicio de una intensa actividad sísmica que dejó dos fallecidos y miles de viviendas dañadas, familias nicaragüenses afectadas por los temblores continúan recibiendo hoy nuevas casas o las construyen con apoyo del Gobierno.
Luego del 10 de abril, cuando un terremoto de 6,2 grados de magnitud en la escala abierta de Richter estremeció la capital y otras ciudades vecinas, las autoridades comenzaron a trasladar hacia esas áreas materiales de construcción y paquetes alimentarios.
A ese primer movimiento telúrico le siguieron réplicas y otras fuertes sacudidas que mantuvieron en tensión a los nicaragüenses durante varias semanas.
En los municipios más perjudicados, pobladores que perdieron sus viviendas han agradecido al Gobierno que encabeza el presidente Daniel Ortega por el respaldo brindado a las familias.
El mandatario refirió recientemente que más de 700 familias perdieron totalmente sus casas, y suman casi cinco mil las viviendas dañadas por los temblores.
Al expresar su preocupación por la pronta entrada del invierno, explicó que problemas logísticos han impedido dar una respuesta a todos los que perdieron sus viviendas, pero el gobierno -aseguró- proseguirá la lucha para ofrecer seguridad a los afectados.
Ortega enfatizó que incluso en medio de la lluvia continuarán las labores.
Las autoridades anunciaron ayer el levantamiento de la alerta roja que se mantenía para seis municipios de los departamentos de Managua y León, los cuales pasaron a amarilla, y rebajaron a verde al resto del país.
Sin embargo, el Sistema Nacional para la Prevención, Mitigación y Atención de Desastres informó que continuará la estricta vigilancia sobre los fenómenos naturales para estar preparados ante cualquier eventualidad.
Gobierno de Nicaragua prosigue atención a afectados por sismos
