Reconoce ONU cortes de agua por terroristas en Alepo, Siria

Naciones Unidas, 21 may (PL) La alta comisionada de Naciones Unidas para los Derechos Humanos, Navi Pillay, reconoció hoy que la organización terrorista Frente al Nusra priva del servicio de agua a pobladores de la noroccidental gobernación de Alepo, Siria.
Recientes reportes indican que el suministro de agua fue cortado deliberadamente por el grupo armado -vinculado a al Qaeda- durante varios días de este mes, provocando afectaciones que aún se mantienen, señaló en un comunicado.
Pillay advirtió que las leyes humanitarias internacionales prohíben atacar, destruir y bloquear medios indispensables para la supervivencia de civiles.
El acceso al agua y la sanidad constituyen un derecho humano esencial para el pleno disfrute de la vida, dijo a propósito de la situación en Alepo, una de las áreas más golpeadas por el conflicto interno del país levantino, donde extremistas y mercenarios apoyados desde el exterior tratan de derrocar al presidente Bashar al Assad.
Sin embargo, la Alta Comisionada no mencionó la palabra terrorismo en su declaración y volvió a acusar a Damasco de violar los derechos humanos, postura rechazada aquí por el embajador permanente de Siria, Bashar Jaafari.
La funcionaria señaló que «el Gobierno y algunos grupos armados han causado tremendo sufrimiento a los civiles en Alepo».
Llamo a las partes en conflicto a detener de inmediato esos ataques indiscriminados, dijo.
Para Jaafari, los pronunciamientos de Pillay sobre Siria suelen ser manipulados y mal intencionados, en sintonía con la campaña enmarcada en la política del cambio de régimen que ejecutan Estados Unidos y sus aliados.
«Luego de tres años de conflicto, la Alta Comisionada nunca ha estado en Siria, no utiliza información fidedigna y manipula la verdad, por lo que usa su posición para afectar a un Gobierno legítimo, lo cual viola el mandato para el que fue electa», denunció recientemente.
El diplomático respondió a las continuas acusaciones con la frase «Nosotros no asesinamos a nuestra gente, es el terrorismo el que mata a civiles y destruye la infraestructura».
Damasco reclama una visión objetiva de la crisis, que parta del reconocimiento de que la clave para encontrar una salida política de las hostilidades pasa por reconocer y poner fin al terrorismo promovido desde el extranjero.

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