Indígenas latinoamericanos dispuestos a compartir experiencias

Naciones Unidas, 22 may (PL) Latinoamérica tiene experiencias positivas que compartir en materia de inclusión social y participación política de los indígenas, las cuales podrían ser útiles en otras partes del mundo, afirmó hoy en Naciones Unidas la activista nicaragüense Mirna Cunninghan.
La representante del pueblo Miskito, ubicado en áreas autónomas de la Costa Caribe del país centroamericano, aseguró a Prensa Latina que en 17 estados de la región se reconocen a los originarios, lo cual se refleja en las legislaciones.
Somos una parte del planeta donde las comunidades autóctonas pueden organizarse, jugar un papel en la democracia y garantizar a las mujeres y jóvenes espacios, afirmó la graduada de medicina, quien participa aquí en la XIII Sesión del Foro Permanente de la ONU para Asuntos Indígenas, el cual presidió hasta 2012.
De acuerdo con Cunninghan, Nicaragua es uno de los países con logros en materia de inclusión de los aborígenes, a partir del reconocimiento a su identidad y sus derechos a la tierra, estableciéndose regiones autónomas en buena parte del territorio nacional.
También destaca la participación política, expresada en la elección de líderes indígenas, precisó la activista, otrora funcionaria del Ministerio de Salud Pública del gobierno sandinista.
Otras naciones latinoamericanas impulsan políticas similares, añadió a propósito del contexto regional.
ûrganos de Naciones Unidas, como el Programa para el Desarrollo, han elogiado el apoyo a los pueblos originarios en Bolivia, Ecuador, Guatemala, México, Nicaragua y Perú.
Según Cunninghan, las buenas experiencias no significan que los indígenas no tengan problemas en Latinoamérica.
Falta muchísimo por hacer, empezando por que entre el reconocimiento de los derechos de las comunidades autóctonas y su aplicación práctica todavía hay una enorme distancia, advirtió.
Además -agregó la representante de los miskitos- siguen las dificultades con el acceso a la tierra y el impacto negativo de la industria extractiva, traducido en los desplazamientos forzados y los daños ambientales.
Otras dificultades tienen que ver con la exclusión, manifestada en los obstáculos para contar con servicios básicos, educación, salud y cultura, dijo la recién nombrada asesora del Presidente de la Asamblea General de la ONU para la Conferencia Mundial de los Pueblos Indígenas, prevista en septiembre próximo.

Deja tu comentario