La Habana, 23 may (PL) El fundador de la Bienal de La Habana, Nelson Herrera Ysla, declaró hoy aquí a Prensa Latina que a su juicio ése evento no desaparecerá porque siempre estará a tono con el tiempo en que se realice.
La Bienal de La Habana celebra actualmente su 30 aniversario y al ser preguntado sobre cómo imagina a la cita cultural dentro de otros 30 años Herrera respondió que la cita cultural siempre va a ser contemporánea, una variable permanente.
«En los próximos años seguirá midiendo el pulso de lo que va a ocurrir en el arte, no tenemos un plan fijo ni conceptos o prejuicios, sino que queremos cambiar a la par de los cambios que ocurren en el mundo», expresó.
La Bienal -sostuvo- estará respondiendo siempre a los asuntos, a la problemática y a todo lo que preocupa al hombre y la cultura contemporáneos por lo que más nos preocupa es seguir siendo actuales, no quedarnos en el pasado.
No es fácil ir a la misma marcha en que lo hacen los distintos tiempos, pero hay que siempre considerarse parte del presente pero mirar hacia el futuro, por lo que la Bienal deberá adaptarse a los cambios que surjan con el pasar de los años, acotó.
Herrera, que desde que se fundó la Bienal de La Habana, en 1984, ha estado presente en sus 11 ediciones, consideró que la V edición fue la que dió la madurez definitiva al que es considerado uno de los principales eventos culturales en el panorama cultural cubano.
«Nos propusimos que la Bienal no muriera, que continuase contra viento y marea y a lo largo de tantos años seguimos aquí, a pesar de las adversidades de tipo económico y otras que no pudieron terminar con su existencia», aclaró el arquitecto y curador. Por último, consideró que la pluralidad, diversidad y reencuentro que caracteriza a la cita habanera son algunas de sus principales virtudes a lo largo de éstas tres décadas de vida, concluyó.
Diversas sedes como el Centro de Desarrollo de Artes Visuales Wilfredo Lam, el Centro de Desarrollo de las Artes Visuales, la Fototeca de Cuba y el Museo Nacional de Bellas Artes acogen una exposición titulada Un laboratorio vivo dedicada a los 30 años de la Bienal de La Habana.
Bienal de La Habana siempre está a tono con su tiempo
