México, 8 mar (PL) A 60 años de conseguir el derecho al voto, las mujeres mexicanas aspiran hoy a romper las barreras que las han limitado en la política, en particular de cara a los comicios de junio próximo.
Ese día se renovará por completo la Cámara de Diputados, donde ellas ocupan 187 de los 500 curules.
La cifra es la más alta desde que se integraron a la Cámara baja, pero sigue siendo insuficiente respecto a sus niveles de integración a los poderes del Estado y la función pública.
Aunque el 51 por ciento del padrón electoral es representado por el sexo femenino, su participación en las votaciones no es similar a sus oportunidades de ser votadas.
Ello a pesar de las diversas cuotas de género que desde 2002 se establecieron en los partidos políticos con el objetivo de lograr una proporción más igualitaria.
Un claro ejemplo ocurrió en las elecciones de 2012. El entonces Instituto Federal Electoral tuvo que regresar las listas de candidatos a los partidos por no cumplir con la cuota de género.
El diario El Universal refiere que este año pudiera ser mejor para quienes aspiran a ser diputadas.
A inicios de 2014 fue aprobada la propuesta de Enrique Peña Nieto para que 50 por ciento de las candidaturas y sus suplentes a diputaciones federales y de senadores de todos los partidos sean mujeres.
La agrupación política que no cumpla ese requisito corre el riesgo de perder su registro y quedar fuera de los comicios.
Con ello se busca evitar el fenómeno conocido como las juanitas, en el que los partidos solo cumplían cuotas de género al momento de las candidaturas, pero después las legisladoras eran obligadas a hacerse a un lado y ceder el puesto a un varón.
Mujeres mexicanas aspiran a mayor participación política
